Numarán, Mich., 2 de agosto. Andrés Manuel López Obrador pidió a los representantes de los partidos de la Revolución Democrática (PRD), del Trabajo (PT) y Convergencia ante el Instituto Federal Electoral (IFE) presentar una denuncia en ese organismo contra Felipe Calderón, “quien se ostenta como presidente de México, (pero) se robó la Presidencia de la República y ahora se quiere robar el petróleo”. El político tabasqueño respondió así a la segunda demanda interpuesta por el Partido Acción Nacional (PAN), ante el IFE, por el reiterado uso de la referencia como “presidente legítimo de México” por parte de López Obrador y sus simpatizantes.
“En el PAN se enojan porque no nos rendimos, porque la gente decidió que hubiera un presidente legítimo”, expresó durante un mitin en este municipio.
Como se ha difundido, el IFE prohibió a PRD, PT y Convergencia, que integran el Frente Amplio Progresista (FAP), ubicar a López Obrador, en mensajes de radio o televisión, como “presidente legítimo de México”.
Pero el jueves pasado, el representante del blanquiazul ante el IFE, Roberto Gil, presentó una nueva queja administrativa contra el PRD por consentir que el político tabasqueño utilice esa frase, situación que –de acuerdo con el criterio de los panistas– significa una clara violación a la Constitución Política y al Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales.
Lo anterior, porque el ex candidato presidencial de la coalición Por el Bien de Todos firmó recientemente una carta como “presidente legítimo de México” para llamar a los ciudadanos a participar en la consulta popular sobre la reforma energética, cuya primera de tres fases se desarrolló el pasado 27 de julio y habrá ejercicios de este tipo el 10 y 24 de agosto próximos.
López Obrador dijo que los panistas “se enojan mucho” porque la gente lo apoya y le dio, en una Convención Nacional Democrática, tal nombramiento.
Y precisamente en esa posición, como “presidente legítimo de México” realiza desde enero de 2007 un recorrido para visitar los 2 mil 500 municipios que componen el país. Hasta el momento ha encabezado asambleas informativas en casi mil 500 ayuntamientos.
Desde el año pasado advierte acerca de los riesgos de abrir la industria petrolera al capital privado nacional y extranjero; avaló la toma de tribuna por parte de los legisladores de los partidos que integran el FAP para evitar la aprobación de la iniciativa –para modificar las normas que rigen a Petróleos Mexicanos– que envió Felipe Calderón al Congreso de la Unión en abril pasado.
Tras ese hecho, promovió un debate nacional, el cual finalmente se realizó en el Senado de la República y, más tarde, promovió por todo el país la consulta para que los ciudadanos votaran “sí” o “no” ante la reforma calderonista.
En su gira número 70 que comenzó el jueves pasado y hasta este domingo, por 25 municipios de esta entidad, marcados por la migración de la mayoría de su población económicamente activa, advirtió que ya está listo el plan de acción de resistencia civil en caso de que AN y el PRI ignoren el rechazo general a la privatización de Pemex.
También ha insistido en que el movimiento que encabeza tomará medidas pacíficas, con base en la voluntad expresada en la consulta, donde 85 por ciento rechazó la iniciativa que se encuentra en el Congreso.
“Yo quisiera que hicieran ellos una convocatoria a una consulta a ver cuántos ciudadanos participaban. Simplemente en el Distrito Federal acudieron a las mesas 830 mil ciudadanos. Eso es una participación libre y consciente de la gente”, señaló.
Este sábado, junto con los senadores Jesús Garibay y Silvano Aureoles, la dirigente del perredismo michoacano, Fabiola Alanís, y presidentes municipales de esta zona principalmente gobernada por el PRD, el tabasqueño refrendó su oposición a la privatización del petróleo y, en particular, a la negociación cupular entre PRI y PAN.
“Vamos bien pero no nos vamos a confiar. Los priístas y panistas de arriba se ponen de acuerdo siempre (...), así que vamos a traerlos a ‘mecate corto’ para que no sigan haciendo sus fechorías”, dijo.
En Zináparo, Churintzio y en Penjamillo y más tarde en Panindícuaro y en Villa Jiménez, zona rural cubierta en esta época del año por el verdor de las milpas, López Obrador ofreció a sus simpatizantes un amplio relato acerca de la historia de explotación del petróleo en el país, desde 1901, en pleno porfiriato, hasta llegar al momento de la expropiación de esta industria, lograda por Lázaro Cárdenas en 1938, a quien llamó ‘presidente patriota’, muy distinto a los vendepatrias y conservadores, como ‘Calderoncito’.
“Si (los empresarios particulares, nacionales y extranjeros) entran de nueva cuenta, no se va a poder recuperar de nuevo el petróleo, porque ahora ese recurso es más ambicionado que hace un siglo”, advirtió.
“En el PAN se enojan porque no nos rendimos, porque la gente decidió que hubiera un presidente legítimo”, expresó durante un mitin en este municipio.
Como se ha difundido, el IFE prohibió a PRD, PT y Convergencia, que integran el Frente Amplio Progresista (FAP), ubicar a López Obrador, en mensajes de radio o televisión, como “presidente legítimo de México”.
Pero el jueves pasado, el representante del blanquiazul ante el IFE, Roberto Gil, presentó una nueva queja administrativa contra el PRD por consentir que el político tabasqueño utilice esa frase, situación que –de acuerdo con el criterio de los panistas– significa una clara violación a la Constitución Política y al Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales.
Lo anterior, porque el ex candidato presidencial de la coalición Por el Bien de Todos firmó recientemente una carta como “presidente legítimo de México” para llamar a los ciudadanos a participar en la consulta popular sobre la reforma energética, cuya primera de tres fases se desarrolló el pasado 27 de julio y habrá ejercicios de este tipo el 10 y 24 de agosto próximos.
López Obrador dijo que los panistas “se enojan mucho” porque la gente lo apoya y le dio, en una Convención Nacional Democrática, tal nombramiento.
Y precisamente en esa posición, como “presidente legítimo de México” realiza desde enero de 2007 un recorrido para visitar los 2 mil 500 municipios que componen el país. Hasta el momento ha encabezado asambleas informativas en casi mil 500 ayuntamientos.
Desde el año pasado advierte acerca de los riesgos de abrir la industria petrolera al capital privado nacional y extranjero; avaló la toma de tribuna por parte de los legisladores de los partidos que integran el FAP para evitar la aprobación de la iniciativa –para modificar las normas que rigen a Petróleos Mexicanos– que envió Felipe Calderón al Congreso de la Unión en abril pasado.
Tras ese hecho, promovió un debate nacional, el cual finalmente se realizó en el Senado de la República y, más tarde, promovió por todo el país la consulta para que los ciudadanos votaran “sí” o “no” ante la reforma calderonista.
En su gira número 70 que comenzó el jueves pasado y hasta este domingo, por 25 municipios de esta entidad, marcados por la migración de la mayoría de su población económicamente activa, advirtió que ya está listo el plan de acción de resistencia civil en caso de que AN y el PRI ignoren el rechazo general a la privatización de Pemex.
También ha insistido en que el movimiento que encabeza tomará medidas pacíficas, con base en la voluntad expresada en la consulta, donde 85 por ciento rechazó la iniciativa que se encuentra en el Congreso.
“Yo quisiera que hicieran ellos una convocatoria a una consulta a ver cuántos ciudadanos participaban. Simplemente en el Distrito Federal acudieron a las mesas 830 mil ciudadanos. Eso es una participación libre y consciente de la gente”, señaló.
Este sábado, junto con los senadores Jesús Garibay y Silvano Aureoles, la dirigente del perredismo michoacano, Fabiola Alanís, y presidentes municipales de esta zona principalmente gobernada por el PRD, el tabasqueño refrendó su oposición a la privatización del petróleo y, en particular, a la negociación cupular entre PRI y PAN.
“Vamos bien pero no nos vamos a confiar. Los priístas y panistas de arriba se ponen de acuerdo siempre (...), así que vamos a traerlos a ‘mecate corto’ para que no sigan haciendo sus fechorías”, dijo.
En Zináparo, Churintzio y en Penjamillo y más tarde en Panindícuaro y en Villa Jiménez, zona rural cubierta en esta época del año por el verdor de las milpas, López Obrador ofreció a sus simpatizantes un amplio relato acerca de la historia de explotación del petróleo en el país, desde 1901, en pleno porfiriato, hasta llegar al momento de la expropiación de esta industria, lograda por Lázaro Cárdenas en 1938, a quien llamó ‘presidente patriota’, muy distinto a los vendepatrias y conservadores, como ‘Calderoncito’.
“Si (los empresarios particulares, nacionales y extranjeros) entran de nueva cuenta, no se va a poder recuperar de nuevo el petróleo, porque ahora ese recurso es más ambicionado que hace un siglo”, advirtió.
