Vuelven de Cuba estudiantes zacatecanos de medicina; 5 obtuvieron condecoración
Estudiantes zacatecanos y cubanos en la Escuela Latinoamericana de Medicina, en Cuba. Cinco de los 40 graduados mexicanos obtuvieron el Título de Oro por conseguir los promedios más altos de la generaciónFoto cortesía de Francisco Morales Flores
Alfredo Valadez Rodríguez
Corresponsal
Periódico La Jornada
Lunes 2 de septiembre de 2013, p. 32
Lunes 2 de septiembre de 2013, p. 32
Zacatecas, Zac., 1º de septiembre.
Este fin de semana regresaron a Zacatecas, después de siete años de estudios y trabajo comunitario en Cuba, 40 jóvenes que se graduaron el 24 de julio de la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM), cinco con los más altos honores académicos, al obtener el Título de Oro.
Los zacatecanos fueron parte del grupo de 4 mil estudiantes extranjeros que este año se graduarán de médicos en Cuba, de los cuales alrededor de 400 son mexicanos. Es el número más alto de estudiantes extranjeros que hayan egresado de la ELAM en las escuelas ubicadas en Colón (Matanzas) y Guantánamo, todos becados por el gobierno de Cuba, así como por distintos partidos y organizaciones de izquierda.
Los nuevos médicos se reunieron este fin de semana con sus familias para festejar, agradecidos con el Frente Popular de Lucha de Zacatecas y el Partido del Trabajo, que financiaron parte de sus becas para estudiar en la isla, y por supuesto,
agradecidos con el comandante Fidel Castro.
Luis Roberto Medrano Álvarez es ganador de uno de los cinco títulos de oro. Señaló que también fue designado
el extranjero más integralentre los mil 400 alumnos de la generación 2006–2013 de la Facultad de Ciencias Médicas de Guantánamo.
Medrano Álvarez, originario del municipio de Nochistlán, confesó que al principio tenía prejuicios sobre lo que significaba ir a estudiar a Cuba.
Fui primero en calidad de observador, a ver si era cierto lo que se decía. Se dicen muchas cosas de Cuba, y quise comprobarlas.
En la isla, Medrano Álvarez se dio cuenta de que Cuba es
completamente diferente a lo que nos decían acá, que no se desayunan a los niños. Destacó que el programa cubano de medicina está muy bien fundamentado, contiene muchas herramientas para
fijar el conocimiento, las cuales no existen en el programa académico convencional mexicano.
Agregó que
los profesores en Cuba son excelentes médicos que te enseñan de corazón todo lo que tienen, y les interesa mucho que tú seas su relevo. No te ven como competencia; por lo tanto, te comparten todo el conocimiento para que lo tengas.
Luis Roberto Medrano dice que no sólo aprendió en aulas y hospitales, y consideró
aleccionadorel modelo cubano de salud pública.
Si llegas a un hospital y si no tienes un peso, no te dejan morir, afirmó.
Sobre la formación humanitaria de los médicos, Francisco Morales Flores –otro de los cinco galardonados con un título de oro–, dijo que en la isla
la medicina no se utiliza para hacer mercado ni ganancias, sino que es gratuita, por lo que el médico no está trastornado y embebido por el dinero. Como médico debes estar en el lugar donde más te necesitan, no donde te resulte más cómodo y rentable poner un consultorio.
Para Daniela Margarita Guerrero Garnica, graduada también con título de oro (lo mismo que Oscar Agustín Chong Alba y Silvestre Nava Rodríguez), la experiencia de estudiar medicina en Cuba es gratificante, porque los médicos allá
te ven como un compañero que en algún momento va a proveerles salud.
De rechazado a egresado
Antes de irse a Cuba. Jorge Miguel Alejandro Cornejo Sandoval trató de ingresar a la Universidad Autónoma de Aguascalientes, pero lo rechazaron y hoy es egresado gracias a que
la oportunidad de ir a estudiar con una beca que cubría todo: estudios, ropa y víveres.
Cornejo Sandoval convivió con estudiantes de toda América Latina, Asia, África y Medio Oriente.
Desde que entramos, hace siete años, estuvimos en contacto con pacientes, mucha práctica. Aprendimos a socializar con la gente pobre, ir a sus casas, atenderlos, y también a valorar a nuestros profesores y especialistas.
Perla Odette Solís Ovalle y Arturo Ortiz Rosales también son parte del grupo de médicos cubano-mexicanos. Coinciden en que en la isla hay un sistema bien estructurado de salud:
En cada colonia hay un consultorio médico; por cada comunidad hay un policlínico; por cada policlínico hay un hospital, a diferencia de aquí, que es muy reducido el servicio: un solo hospital para toda una población, señala Perla Odette Solís
