martes, 29 de octubre de 2013

Aclarará la SCJN derecho a exigir 50% del patrimonio logrado en el matrimonio

Aclarará la SCJN derecho a exigir 50% del patrimonio logrado en el matrimonio
La controversia sobre un artículo de aquella entidad la planteó un empresario textil
Alfredo Méndez
 
Periódico La Jornada
Martes 29 de octubre de 2013, p. 37
La primera sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) aclarará en breve una duda que tiene confundidos a los jueces y magistrados en materia civil y familiar del país: definir si es constitucional que las mujeres u hombres que se dedican exclusivamente al cuidado de sus hijos y al hogar tienen derecho, al momento de tramitar su divorcio, a exigir hasta 50 por ciento del patrimonio logrado durante su unión matrimonial.
Fuentes de la Corte informaron a La Jornada que el ministro Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena presentará esta semana un proyecto de resolución en el que plantea a sus cuatro compañeros de sala convalidar la constitucionalidad del artículo 4.46 del Código Civil para el estado de México, que otorga ese beneficio a las personas que se dedicaron preponderantemente al cuidado de los hijos durante el matrimonio.
Se trata de un derecho establecido en legislaciones civiles del estado de México, Tlaxcala y Puebla, entre otras entidades, lo que ha provocado dudas entre los juzgadores dedicados a materias civil y familiar, puesto que algunos se han negado conceder ese beneficio a mujeres u hombres que lo han solicitado.
Hasta ahora no existe un estándar que regule en qué casos procede el porcentaje máximo de 50 por ciento del patrimonio en favor de la persona beneficiaria, o en qué circunstancias debe otorgarse un menor porcentaje.
La controversia sobre la constitucionalidad del artículo 4.46 del Código Civil para el estado de México llegó a la SCJN ante la petición del empresario del ramo textil Mayer Zaga Romano, uno de los más adinerados del país, quien para evitar otorgar 25 por ciento de su patrimonio a su ex esposa Elisa Mizrahi Ambe y a sus cuatro hijos –de acuerdo con el fallo que recibió de tres instancias judiciales– llegó al extremo de denunciarlos penalmente, acusándolos de delitos no graves, como falsedad de declaración y abuso de confianza.
Este diario contactó a Elisa Mizrahi, integrante de la comunidad judía en México, quien aseguró que Mayer Zagaacaba de presentar en mi contra, y en contra de mis hijos, hace escasas tres o cuatro semanas, una querella ante la agente del Ministerio Público de Huixquilucan de la Procuraduría General de Justicia del estado de México, Carmelita Sara Cortés Hernández, por una supuesta falsedad de declaraciones (averiguación previa MRZ/HUIX/18/2013). Me preocupa, porque la MP pareciera que tiene intenciones de consignarme, pero no le cae el veinte de que la acusación deriva de la actitud vengativa de mi ex esposo, quien presentó la denuncia para que me desista de mi derecho de recibir 25 por ciento del patrimonio que nos corresponde a mí y a mis hijos. Nos está inventando acusaciones, busca perjudicarnos a como dé lugar, destacó.
Al borde del llanto, acompañada de sus hijos, sostuvo: Mayer Zaga ya me amenazó: si no me desisto ante los jueces va a cambiar de propietario los bienes y cuentas que tiene en Estados Unidos. Incluso me ha dicho que es capaz de vender sus acciones de la sociedad Textiles Zaga, SA de CV, con tal de que mis hijos y yo no obtengamos un peso de lo que por ley nos corresponde.
No es la primera vez que el empresario textil acusa a su ex cónyuge. La mañana del 6 de septiembre de 2010, Mizrahi Ambe salía de su domicilio para visitar a su madre cuando una patrulla de la policía mexiquense la detuvo, la bajó de su automóvil, le colocó esposas y la trasladó al penal femenil conocido como Santiaguito. La imputación: supuesto abuso de confianza por haber chocado un automóvil Mercedes Benz.
Estuve una noche en prisión, la peor de mi vida, acusada de utilizar un vehículo, propiedad de su marido, sin su autorización. Es el acto más ruin que una persona puede hacer contra otra, dijo la mujer, que dos días después recuperó su libertad tras pagar una fianza cercana al millón de pesos