miércoles, 23 de octubre de 2013

Vender inhalantes a niños y adolescentes ya es un delito equiparable a corrupción de menores

Vender inhalantes a niños y adolescentes ya es un delito equiparable a corrupción de menores
Andrea Becerril y Víctor Ballinas
 
Periódico La Jornada
Miércoles 23 de octubre de 2013, p. 41
El Senado aprobó ayer reformas a la Ley General de Salud para equiparar la venta o suministro de productos inhalables a niños y adolescentes al delito de corrupción de menores, con una pena de siete a 15 años de prisión.
Se trata de una iniciativa presentada por la entonces diputada del PRI y hoy senadora Cristina Díaz, que estuvo dos años en el Senado y ayer se aprobó con 90 votos en favor y pasó al Ejecutivo federal para su promulgación.
En tribuna, la senadora Díaz expuso que el consumo de inhalantes es un grave problema sanitario, porque sus consumidores son niños y adolescentes.
La etapa de inicio son los nueve años de edad, dijo, ya que esos estimulantes son fáciles de adquirir y baratos, por lo que la adicción se da en menores de clases sociales media-baja y baja, con problemas de abandono familiar.
La presidenta de la Comisión de Salud, Maki Esther Ortiz (PAN), hizo notar que en el corto y mediano plazos los inhalables representarán un problema serio, dado el incremento de consumo en adolescentes.
Destacó que se trata de sustancias consideradas volátiles, que producen vapores químicos, que pueden ser inhalados e inducir efectos sicoactivos que se encuentran en la gasolina, anestésicos, limpiadores, pegamentos, adhesivos o productos de limpieza.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Adicciones 2011, los inhalables representan 40.4 por ciento del uso de sustancias que utilizan los jóvenes y el principal grupo afectado está en el rango de entre 12 y 14 años.
De 1994 a 2000 creció 50 por ciento el número de consumidores
La senadora Díaz recalcó que 2 millones de adolescentes entre 12 y 17 años reportan que han usado productos inhalables por lo menos una vez en su vida, y lo más grave es que entre 1994 y 2000 el número de consumidores aumentó más de 50 por ciento. En el dictamen se establece que violar la disposición contenida en el segundo párrafo al artículo 220 y el artículo 467 Bis a la Ley General de Salud, en materia de productos inhalables será equiparable al delito de corrupción de personas menores de 18 años de edad o de personas que no tienen capacidad para comprender el significado del hecho o de personas que no tienen capacidad para resistirlo