lunes, 16 de abril de 2007


No se vale cargar miedos

No se vale cargar miedos


Por Lina Pérez Cerqueda

La primera vez que estuve con una chava, no me cuidé. Después vino la ansiedad y el temor, la culpa de por qué no lo hice. A partir de asistir al grupo Cuenta Conmigo, aprendí que nada vale para cargar con los sentimientos de miedo…


Marcela Lagarde nos dice que en culturas como la nuestra, cuya regla dominante es la heterosexualdad exclusiva y excluyente de otras formas de sexualidad, no se admite la coexistencia de la homosexualidad.


“La relación amorosa y erótica entre mujeres, culturalmente es tomada como una trasgresión, un rechazo al erotismo con los hombres, pues el heteroerotismo de las mujeres es un espacio de adoración a los hombres y de dependencia vital y sujeción de las mujeres” (Los cautiverios de las mujeres: madresposas, monjas, putas, presas y locas, UNAM, 2001).


Hombres y mujeres hemos aprendido que las mujeres se deben al cuidado de los otros y esto se refleja en la atención a su salud física y emocional.


Entre las chavas lesbianas se ve con incredulidad que la penetración de los dedos o el sexo oral pueda representar riesgo de infecciones. Pero más que de la práctica, el mayor o el menor riesgo depende del auto cuidado de cada persona.


El bajo riesgo de transmisión del VIH/sida por relaciones sexuales desprotegidas entre mujeres ha favorecido que no se preste atención a otras infecciones de transmisión sexual y a las maneras de prevenirlas.


El virus del papiloma humano (VPH) se transmite también en mujeres que tienen sexo con otras mujeres. Una investigación de la Universidad de Washington, publicada por el American Journal of Public Health, encontró que el virus es detectable en lesbianas, incluidas aquellas que no tienen una historia previa de relaciones sexuales con hombres. De acuerdo con otras investigaciones, el sexo oral, la masturbación mutua, compartir objetos como juguetes sexuales son las prácticas más comunes entre las mujeres. Todas ellas pueden ser fuentes de transmisión del VPH.


El grupo me ha ayudado mucho, pues he obtenido información de todas las alternativas que tenemos las lesbianas, los dedales, el condón, uso de lubricantes, pero sobre todo he trabajado mis procesos emocionales, la forma de manejar mi orientación, la aceptación y el conflicto con mis padres.


Si yo no me aceptó como chava lesbiana no voy a saber el modo adecuado de cuidarme, pues estoy negándome a mi misma, lo que soy. El grupo me ha ayudado a estar más con mi cuerpo, conmigo misma. (Gabriela, 22 años, integrante del grupo Cuenta Conmigo).


Siguiendo a Marcela Lagarde “El poder de las mujeres emana de la valoración social y cultural de su cuerpo y de su sexualidad”.

Nos reunimos de 11:30 a 15:00 hrs.No te quedes con las ganas, pide mayores informes en Letra S. en el Centro Cultural y Recreativo “Niños Héroes” del DIF-DF, ubicado en Popocatépetl (Eje 8 sur) No. 276, entre prolongación Uxmal y División del Norte, Col. Santa Cruz Atoyac.
Cuenta conmigo, Jóvenes Gay, lesbianas, bisexuales y Familias es un proyecto de coparticipación entre Letra S y DIF-DF Tel.: 5532-2751 Correo: jovenesg@letraese.org.mx