sábado, 24 de octubre de 2009
1810, 1910, ¿2010?
Pongan atención en el punto donde se toca a los intelectuales (1810: Fray Servando Teresa de Mier; 1910: los Flores Magón; 2010: ¿?), pues ahí esta en dónde se puede hacer una diferencia. Todas las analogías realizadas por "El fisgón", son presentadas claramente y se observa lo similares que pueden llegar a ser estas tres fechas, por lo que debemos ocuparnos por aquellos detalles en que podemos cambiar a nestro país.
Ahora bien, he criticado y por lo tanto me veo en la necesidad de proponer. No harán falta fúsiles ni levantamientos, este 2010 simplemente tendrá que pasar de largo, por qué si queremos cambiar aquellos patrones que nos mantienen atados a un ciclo represión-¿libertad?-represión-¿libertad?, tenemos que hacer cambios drásticos en algún punto de ese círculo vicioso y si el sistema no ha cambiado la forma en que reprime a los de abajo, seremos los de abajo los que cambiemos a una revolución idológica (no idealista) en el terreno de aquello que me atrevería a llamar "espíritu mexicano", el cual tiene una ambivalencia hasta el momento incomprensible, pues el mexicano actual no es el mexicano puro de hace más de quinientos años, ni el cristiano puro, el mexicano actual es la suma de ambos, el mexicano actual es esclavo y amo al mismo tiempo.
No pretendo explicar esto, pues aún no es posible, mas considero que la comprensión del mexicano en estas dimensiones, lo llevará al menos a una libertad diferente de las vividas hace cien y doscientos años, no puedo decir que sería mejor, pero si puedo asegurar que sería diferente.
Andres DiSa
Ahora bien, he criticado y por lo tanto me veo en la necesidad de proponer. No harán falta fúsiles ni levantamientos, este 2010 simplemente tendrá que pasar de largo, por qué si queremos cambiar aquellos patrones que nos mantienen atados a un ciclo represión-¿libertad?-represión-¿libertad?, tenemos que hacer cambios drásticos en algún punto de ese círculo vicioso y si el sistema no ha cambiado la forma en que reprime a los de abajo, seremos los de abajo los que cambiemos a una revolución idológica (no idealista) en el terreno de aquello que me atrevería a llamar "espíritu mexicano", el cual tiene una ambivalencia hasta el momento incomprensible, pues el mexicano actual no es el mexicano puro de hace más de quinientos años, ni el cristiano puro, el mexicano actual es la suma de ambos, el mexicano actual es esclavo y amo al mismo tiempo.
No pretendo explicar esto, pues aún no es posible, mas considero que la comprensión del mexicano en estas dimensiones, lo llevará al menos a una libertad diferente de las vividas hace cien y doscientos años, no puedo decir que sería mejor, pero si puedo asegurar que sería diferente.
Andres DiSa
Suscribirse a:
Entradas (Atom)