sábado, 30 de junio de 2007

Fisting

La práctica de introducir la mano y el brazo dentro del recto, quizá no sea la primera cosa que te venga a la mente cuando piensas en hacer el amor, pero puede llegar a llenarte mucho. Porque lo cierto es que la confianza, la comunicación y el tiempo que se necesita para el fisting, hacen de la intimidad una palabra mayúscula. Según la práctica del fisting, la humanidad se divide en dos grupos: los que nunca han intentado y piensan: "¡auch, es un asco esto!", y los que si lo han intentado y piensan: "¡woooow, que maravilla!". El mejor modo de reconciliar ambas posturas es conocer y deshacer algunos de los mitos que circulan en torno a dicho acto, como por ejemplo los anos vencidos, la incontinencia urinaria y los súper puños que entran de una sin preámbulos. Para una práctica segura del fisting se requiere de una buena información. Podría empezar diciendo que en estos casos el tamaño SI importa, y puede que no todas las parejas logren llevarlo a cabo. Un buen ejemplo es el típico oso corpulento de casi dos metros de altura y su pequeño novio de 60 kilos; ciertamente, es posible que no tengan una respuesta de fisting muy competente. Pero con un poco de práctica y paciencia, muchas parejas pueden convertir la exploración profunda anal y amorosa en parte de su relación sexual.Así es caballeros, el fisting ha dejado de ser solo para las alimañas más desagradables.Recomendaciones totalesExiste el dolor bueno y el malo. Puede que al principio del fisting te parezca un asunto extraño e incómodo, pero al principio no tendría que hacerte soltar necesariamente un grito devastador, así que en cuanto percibas la más mínima incomodidad, aplaza el asunto.Cero estimulantes: Las drogas y el alcohol disminuyen la capacidad de reaccionar ante los dolores y atontan la mente, o sea, te convierten en un imbécil. Si de verdad quieres llegar hasta el fondo del asunto, las dos partes tienen que estar en absoluta posesión de sus facultades mentales y físicas.Prende las luces. Necesitas ver lo que estas haciendo para que no te vayas de paso o te quedes corto.Quítate pulseras y anillos, no tengo que decirte porqué.Córtate bien las uñas y las cutículas muy bien, si puedes rascar con ellas es que todavía están largas.Al menor signo de sangre detente, hay quienes dicen que es normal un poco de sangre, pero ¿para que arriesgar tu ano?. Si sigues sangrando y te duele después de un día, ve al médico.Algunos expertos recomiendan no tener penetración anal después de un fisting, un día nada más. Esto con el fin de dar tiempo a que se cicatricen las posibles heridas durante el acto.Para los que reciben el puño, se trata de una experiencia que conlleva una gran vulnerabilidad física y psicológica, mientras que para los que ponen el puño es una demostración de poder. Puede ser escalofriantemente intenso para ambas partes, así que si no tienes una relación de pareja de confianza donde estas situaciones puedan resultar incómodas, quizá prefieran darse por vencidos de entrada. Esto explica un poco el porque los sadomasoquistas practican bastante el fisting.UTENSILIOS BÁSICOSGuantes de goma: además de ayudarnos a prevenir posibles infecciones así como el contagio de infecciones de transmisión sexual como consecuencia de pequeños desgarros o heridas, ya sea en las manos o en los tejidos internos, los guantes también contribuyen a facilitar una entrada y salidas fluidas. El látex es lo que mejor va, siempre y cuando no se sea alérgico a él. Si este es tu caso, puedes optar por otro material sintético. Para el fisting más formal, los guantes de goma hasta el codo siempre dan un toque de elegancia, aunque puede que al verlo tu pareja se cague encima (literal).Suspensión (puede ser opcional): a muchos receptores del fisting anal les gusta servirse de algún tipo de artefacto (arnés o hamaca), eslingas colgadas del techo o estribos para una postura que facilite la exposición. Si no tienes presupuesto para adquirir artículos para el bondage, puedes usar unas almohadas.Lubricación. Lo más importante. Preferentemente con dosificador para poder proceder a una práctica y rápida aplicación con una sola mano. Y ten también a mano un poco de agua para agilizar los lubricantes espesos. Utiliza preferentemente un lubricante hecho a base de agua o silicón, porque el aceite suele degradar el látex y los de petroleo pueden dañar las mucosas internas. Los lubricantes Wet son ideales para estos magnos actos.Recuerda, la buena comunicación, los buenos cuidados y la confianza nos ayudan a llevar una sexualidad