domingo, 10 de junio de 2007

QUE ES UN BISEXUAL

La bisexualidad, en la sexualidad humana, hace referencia al deseo romántico o sexual hacia personas de ambos sexos. El término tiene el mismo origen que los que se refieren a las otras orientaciones sexuales, homosexualidad y heterosexualidad.

Aunque se ha observado en gran variedad de formas en todas las sociedades humanas de las que quede registro escrito, la bisexualidad sólo ha sido objeto de estudio serio desde la segunda mitad del siglo XX y aún hay desacuerdos sobre su prevalencia y naturaleza.

Tabla de contenidos

Descripción
La orientación bisexual comprende todo el territorio entre los dos extremos de homosexualidad y heterosexualidad. Las personas bisexuales no se sienten atraídas necesariamente por igual a los dos sexos y algunos tienen preferencia por uno u otro. Otra posición sobre la bisexualidad es que la homosexualidad y la heterosexualidad son dos orientaciones monosexuales, y la bisexualidad abarca ambas. Otros, en cambio, sostienen que la bisexualidad es una orientación sexual distinta y paralela a la heterosexualidad y la homosexualidad.
Las personas bisexuales, igual que las de cualquier otra orientación, pueden asumir varios tipos de relaciones, tales como monogamia, poliamoría, polifidelidad, promiscuidad, sexo grupal, y celibato. Para aquellos que tienen más de una pareja sexual, éstas pueden ser o pueden no ser todas del mismo sexo.

Prevalencia de la bisexualidad
Algunas encuestas muestran de un 2% a un 6% de las poblaciones modernas occidentales como bisexuales, aunque hay dificultades metodológicas con respecto a la aleatoriedad y el tamaño de la población de muestra y la precisión de reportes de información tan personal. Otros estudios usan estándares diferentes para la bisexualidad. Otros incluso ignoran por completo el fenómeno bisexual o lo separan en componentes homosexual y heterosexual. Los distintos resultados no coinciden en si la bisexualidad es más o menos común que la homosexualidad (usando diversas definiciones para cada una). Reportes anecdóticos fuera del mundo occidental sugieren índices mucho más altos de bisexualidad.
Algunos estudios, entre ellos los estudios Comportamiento sexual del hombre (1948) y Comportamiento sexual de la mujer (1953) de Alfred Kinsey, han mostrado que la mayor parte de la población parece ser al menos ligeramente bisexual. La mayoría tiene cierta atracción hacia ambos sexos, aunque se suele preferir uno de ellos.
Según las encuestas de Kinsey, sólo el 5%-10% de la población puede ser considerada como exclusivamente heterosexual u homosexual, por lo que el resto (entre un 80% y un 90%) de los hombres y mujeres estudiados eran bisexuales. Sólo un 5% de éstos no tenían ninguna preferencia especial entre hombres y mujeres.

Estatus social de la bisexualidad

Históricamente, la bisexualidad ha estado casi siempre libre del estigma social que acarrea la homosexualidad, existente aún donde la bisexualidad era la norma. Por todo el mundo, entre los hombres de clase alta y de prestigio, las aventuras homosexuales se aceptaban en silencio, y comúnmente se usaba un matrimonio heterosexual como defensa exitosa contra acusaciones de homosexualidad.
Por otro lado, hay bisexuales que se casan o viven con una pareja heterosexual porque prefieren la complementariedad de los distintos sexos en el emparejamiento y la cohabitación, pero que se han sentido enriquecidos por las relaciones homosexuales al margen del matrimonio tanto en relaciones monógamas como poliamorosas.
Algunas personas en las comunidades gay y lésbicas acusan a los que se identifican como bisexuales de hipócritas, pensando que son en realidad homosexuales que participan en actividad heterosexual solo para seguir siendo socialmente aceptables. Pueden ser acusados de “no hacer lo suyo” por ganar reconocimiento de la “verdadera” homosexualidad. Algunos incluso creen que un autodenominado bisexual es sólo un homosexual en la fase inicial de cuestionamiento de su supuesta heterosexualidad, y finalmente aceptará que es homosexual.
Esto puede ocurrir, y de hecho ocurre, pero no parece ser cierto para la mayoría de los que se denominan bisexuales. A veces, los bisexuales reciben menos aceptación por parte de gays y lesbianas, por su orientación sexual.

Bandera del orgullo bisexual
Dado que algunos bisexuales sienten que no encajan ni en la comunidad gay ni en el mundo heterosexual, y dado que tienden a ser “invisibles” en público (confundiéndose sin problemas en las sociedades homosexual y heterosexual), algunos de ellos han formado sus propias comunidades, cultura y movimientos políticos. Sin embargo, puesto que la orientación bisexual puede estar en cualquier punto entre los dos extremos de homosexualidad y heterosexualidad exclusivas, otros de los que se identifican como bisexuales prefieren formar parte de la sociedad homosexual o heterosexual.
Un símbolo común de identidad bisexual es la bandera del orgullo bisexual, diseñada por Michael Page, que tiene una franja rosada que representa la homosexualidad, una azul que representa la heterosexualidad y una morada (mezcla del rosado y el azul) en la mitad que representa la bisexualidad.

Los triángulos sobrepuestos
Otro símbolo de identidad bisexual que usa el esquema de colores de la bandera bisexual consiste en un triángulo azul y uno rosado sobrepuestos (el triángulo rosado es un reconocido símbolo de la comunidad homosexual), formando uno morado en su intersección.
A muchos homosexuales y bisexuales les disgusta el uso del triángulo rosado como su símbolo, pues fue el símbolo usado por el régimen de Hitler para marcar homosexuales (de la misma forma que la estrella de David usada por los judíos). Estas personas simplemente no quieren representarse o identificarse como un grupo reprimido.

Bifobia
La bifobia es un neologismo que se refiere al rechazo irracional hacia las personas bisexuales o hacia la bisexualidad misma. Se refiere al punto de vista de que las personas deben pertenecer obligatoriamente a alguna de las otras dos orientaciones sexuales: heterosexualidad u homosexualidad (monosexualidad obligatoria). Las personas bisexuales pueden ser objeto de ataques bifóbicos pues se les exige una supuesta “definición” de su orientación sexual en términos dicotómicos de una u otra; sin embargo, la bisexualidad es una orientación tan definida como las otras.