martes, 11 de diciembre de 2007

Acusan a Torreblanca de represor

Acusan a Torreblanca de represor
Sergio Ocampo Arista, corresponsal
Chilpancingo, Gro., 10 de diciembre. El Comité de Familiares y Amigos de Desaparecidos, Secuestrados y Asesinados de Guerrero demandó la presentación de ocho personas que desaparecieron entre febrero y junio, y denunciaron que el gobierno del perredista de Zeferino Torreblanca se ha caracterizado por no respetar los derechos humanos.
En un acto político realizado en el zócalo de esta capital con motivo del 59 aniversario de la Declaración de los Derechos Humanos, Javier Monroy, vocero del comité, recordó el encarcelamiento de indígenas, los desalojos de estudiantes y egresados de la Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa, el 14 y 30 de noviembre, así como el constante “acoso” a los comuneros que se oponen a la construcción de la presa La Parota.
Manifestó que en Guerrero “no tenemos nada que celebrar, porque ha habido desconocimiento y menosprecio total del gobierno con relación a los derechos humanos, lo que se expresa en las políticas públicas que lleva a cabo el gobierno, en que no cumple con sus funciones de proporcionar seguridad a sus habitantes, y en que, como caso extremo, reprime a quienes exigen su cumplimiento”.
Los integrantes del comité, quienes participan en el Frente Nacional Contra la Represión, encabezado por la senadora Rosario Ibarra, exigieron la presentación con vida de Jorge Gabriel Cerón Silva, Ludwig Hernández Cisneros y Rafael Ramírez Benítez, originarios de Chilpancingo, así como de Víctor Manuel Rodríguez Jiménez y Dionisio Rodríguez Jiménez, de Acapulco.
También demandaron la presentación de Pedro Salgado Mora, Cuauhtémoc Román Navarro y Rodrigo Camacho Rodríguez, de Iguala, así como el esclarecimiento del crimen del menor Roberto Arcos Catalán, ocurrido en esta ciudad.
María de Jesús Cisneros, madre de Ludwig Hernández, desaparecido el 23 de mayo en Chilpancingo, leyó un documento denominado “Pacto social por la vida, la libertad, la justicia y los derechos humanos”, en el cual los miembros del comité se solidarizan con los movimientos de los egresados de la normal de Ayotzinapa, de las organizaciones integrantes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Guerrero, con los opositores a La Parota con la policía comunitaria, con las mujeres del Rincón de Chautla, de Chilapa, cuyos maridos están presos, acusados de asesinato, que niegan haber cometido.