Hola
Muchas personas consideran que existe una union inquebrantable entre la espiritualidad y la religión.
Se puede ser espiritual sin religión o sin Dios?
Cuantas ideas o conceptos existen de "espiritualidad"?
Cual creencia religiosa tiene "la verdad"?
Remito este interesante articulo sobre el tema con el fin de re-pensar y afirmar o de-construir la idea que tenemos con relación a este tema.
En lo personal, me considero un ser espiritual, sin embargo las religiones son formas de control y de poder de las cuales me aparto, respetando -por su puesto- a quienes las profesan y sus practicas como una expresion mas de la aceptacion y respeto por las diferencias dentro de una democracia. Es mas he compartido experiencias religiosas y defiendo la libertad de cultos como un derecho humano.
German Humberto Rincon Perfetti
Bogota - Colombia
Sarah Oelberg, 9 de febrero de 2003(Traducción de Francisco Javier Lagunes Gaitán)
Solía detestar la palabra 'espiritualidad'. Era, para mí, una palabra que trataba de evitar a toda costa. Tal vez la evitaba porque no la entendía —probablemente debido a que parece significar muchas cosas, y algo diferente casi para cada quien. Si es verdad que si pides a 25 unitarios universalistas (UU) que te digan qué es lo que creen los UU, obtendrás al menos 26 respuestas diferentes; es aún más cierto que si les preguntas a 10 personas qué significa la 'espiritualidad' para ellas, obtendrás 50 ó más respuestas. Así que es difícil decir bien a bien qué es esta espiritualidad que tantos buscan. Se ha llegado a convertir en una especie de palabra basura, que puede significar cualquier cosa, dese la astrología, al budismo Zen.Supongo que parte de mi resistencia a usar la palabra espiritualidad se debía a algunos de los significados que tiene para la gente —significados que no me decían nada desde mi experiencia. Por ejemplo, para algunos, la espiritualidad equivale a aceptar al Cristo como Señor y salvador. Las nociones tradicionales de espiritualidad se refieren a un ámbito no-físico del mundo, separado de la tierra y de sus habitantes —un ámbito lleno de dioses, espíritus, fantasmas y cosas así. Se trata de la creencia descarada en dioses, diosas y espíritus. En ese sentido, me parece que no es sino una nueva manera de hablar de las mismas viejas cosas.
Solía detestar la palabra 'espiritualidad'. Era, para mí, una palabra que trataba de evitar a toda costa. Tal vez la evitaba porque no la entendía —probablemente debido a que parece significar muchas cosas, y algo diferente casi para cada quien. Si es verdad que si pides a 25 unitarios universalistas (UU) que te digan qué es lo que creen los UU, obtendrás al menos 26 respuestas diferentes; es aún más cierto que si les preguntas a 10 personas qué significa la 'espiritualidad' para ellas, obtendrás 50 ó más respuestas. Así que es difícil decir bien a bien qué es esta espiritualidad que tantos buscan. Se ha llegado a convertir en una especie de palabra basura, que puede significar cualquier cosa, dese la astrología, al budismo Zen.Supongo que parte de mi resistencia a usar la palabra espiritualidad se debía a algunos de los significados que tiene para la gente —significados que no me decían nada desde mi experiencia. Por ejemplo, para algunos, la espiritualidad equivale a aceptar al Cristo como Señor y salvador. Las nociones tradicionales de espiritualidad se refieren a un ámbito no-físico del mundo, separado de la tierra y de sus habitantes —un ámbito lleno de dioses, espíritus, fantasmas y cosas así. Se trata de la creencia descarada en dioses, diosas y espíritus. En ese sentido, me parece que no es sino una nueva manera de hablar de las mismas viejas cosas.
Pero la espiritualidad también se ha convertido en un mantra(1) para los neopaganos, wiccas(2) y todo un surtido de religiones New Age(3) o Nueva Era, que lo usan para referirse a algún espíritu trascendente, personaje que sería entendible para ellos, pero que no estaría disponible para el resto de nosotros que no compartimos sus visiones particulares. Si les pides que intenten explicar lo que espiritualidad significa para ellos, una cierta mirada ausente celestial se manifiesta en sus ojos y te hablan de alguna experiencia espiritual y esperan que la compartas y la creas sin mayor explicación. Me siento molesta cuando alguna persona o grupo intenta proclamar un conocimiento y propiedad exclusivo de algo que ellos dicen que es maravilloso, y no lo hacen accesible a todo el mundo.También he notado que la palabra espiritualidad se usa frecuentemente para describir todo lo que se clasifica dentro de la categoría de New Age: por ejemplo, los cristales, los ángeles guardianes, el canalizar, diferentes entidades, varias formas de adivinación, magia blanca, experiencias extracorpóreas, y otras semejantes. Como humanista racional, supongo que tengo dificultades con esta representación de la espiritualidad, y si es así como la gente interpretará la dichosa palabra, no quiero ser acusada de usarla en ese sentido.La espiritualidad que se vende en las librerías, en los retiros y programas televisivos tiende a ser de la clase tenue, neblinosa y rica en atractivo para el narcisismo. La gente 'muy espiritual' que discurre largo y tendido en estos ámbitos no es la clase de gente que se junta con otros para construir servicios para la gente sin hogar, o que lleva a cabo obras de amor; ellos desprecian la religión organizada, y prefieren la evanescencia personal, en vez de desempeñarse bien en colectividad. Ahora que, sé bien que la religión propia debe ser una cosa eminentemente personal —¿acaso no dijo incluso Jesús que debíamos orar solos?—, pero no creo que él quisiera decir que nuestra práctica de la religión, o de la espiritualidad, debiera excluirnos de involucrarnos en la sociedad. Más bien, pienso que él quería que contempláramos el estado de cosas del mundo, para que pudiéramos entrar en él más efectivamente. No se trata de nosotros como individuos; se trata de cómo nos movemos, vivimos y servimos en el mundo que nos rodea.
Tengo también la impresión de que, para algunos, la 'espiritualidad' les sirve como una forma de escapismo. Parece que carece de fundamento: no se basa en el mundo real; no se basa en lo que conocemos en nuestra época sobre la naturaleza del mundo y del universo. Parece, frecuentemente, ser un regreso hacia un mundo prístino anterior, el mundo anterior de los nativos americanos, o de alguna otra religión mundial, o de lo que sea. Y me parece que una auténtica espiritualidad requiere de nosotros que enfrentemos decidida y valientemente nuestro mundo, el mundo de nuestro tiempo, el mundo como lo conocemos hoy —que le hagamos frente incorporándonos a él.También encuentro que algunos que usan la dichosa palabra, lo hacen para expresar su mala disposición hacia la religión organizada. Dirán, "Bien, ¿sabes?, no soy una persona religiosa. No voy a la iglesia (o templo, o sinagoga) —¡Pero soy muy espiritual!". Pienso que esto podría significar: "He tenido una mala experiencia con la religión organizada, o pienso que todas me parecen sospechosas, o incluso malvadas, pero disfruto de una sensación de asombro al estar solo bajo las estrellas". O tal vez significa, "La religión institucional me aburre, no me llama la atención, me resulto fría y tuve que encontrar un grupo de 12 pasos, o un curso de milagros, o un grupo de afinidad, o una clase de estudio sobre los ángeles, o alguna otra variedad de grupo extraeclesial para llenar mis necesidades espirituales".Esta píldora no me la trago. Creo que cada persona es religiosa de alguna manera. Muchos expertos han estudiado el impulso religioso que está aparentemente grabado en el fondo de nuestro mismo ser. Sí, encontramos diferentes formas de expresarlo y nutrirlo; pero está ahí. Y, el hecho mismo de que estos prófugos de las iglesias parezcan tener la necesidad de encontrar alguna otra clase de grupo que cubra sus necesidades espirituales me habla de que la urgencia humana por ser parte de algo más allá de uno mismo es también muy fuerte. Para muchos, es más que evidente que estos grupos "alternativos" se han convertido en el equivalente de la iglesia —incluso escuchamos a la gente decir que su programa de 12 pasos es su iglesia; y sus enseñanzas, su religión.Así que ahora pueden ver por qué dudé de usar la palabra "espiritualidad" en el pasado -y, desde luego, por qué todavía tengo algunos problemas con ella. No soy la única ministra UU que tiene estas reservas hacia la dichosa palabra. Muchos ministros han bromeado sobre la espiritualidad que avanza rampante entre nuestras congregaciones. Como lo señalara Ron Knapp, ya no somos "El pueblo congelado de Dios"(4) como se nos pudo haber acusado anteriormente; nos hemos descongelado completamente y ahora fluimos sin orden ni concierto derramándonos por todos lados. Para mezclar las metáforas, dijo él, "somos como la persona que logró encaramarse penosamente a un caballo, solo para salir disparada hacia las cuatro direcciones al mismo tiempo."Calmadamente, comienzo a darme cuenta de que negar o ignorar completamente la dichosa palabra me pondría en la misma categoría que al ateo que, debido a que no podía creer más en el Dios Padre antropomórfico, todopoderoso, y que todo lo sabe, sentado en un trono en el Cielo y que interferiría en la vida cotidiana de todo el mundo, declaró que sería ateo y que negaría completamente toda existencia de cualquier clase de dios, y se rehusaría a usar lenguaje sobre dios para cualquier propósito.
Recuerdo haber asistido al simposio Bragg en la Iglesia de Todos los Santos UU en la Ciudad de Kansas, hace algunos años, y que participé en una sesión con el rabino Sherwin Wine, dirigente de la Sociedad para el Humanismo Judío. De alguna manera llegamos al tema de las palabras sobre dios y, por dos horas, el distinguido e insistente rabino habló largo y tendido sobre cómo es que no hay nunca, jamás, bajo ninguna circunstancia de ninguna clase, ninguna razón para usar la palabra Dios. Siempre hay un substituto aceptable, nos dijo. Algunos intentamos sugerir que, a veces, para ser capaces de comunicarnos con otros, necesitamos usar un lenguaje común; que podríamos darle un significado propio especial a la dichosa palabra, pero que no deberíamos renunciar completamente a ella sólo porque no nos gusta el significado que alguien más le da. "NO", gritó él, esa sería la salida fácil —no hay excusa para que una persona racional use palabras irracionales, y así sucesivamente. Por cierto, un tiempo después de esa penosa sesión, revisaba los estantes de una librería y me encontré con su nuevo libro —el título era "El humanismo más allá de Dios". Tuve que comprarlo.Al recordar esa experiencia, me di cuenta de que tal vez estaba yo siendo tan dogmática sobre la palabra "espiritualidad" como Sherwin lo era con la palabra "Dios". Y, sé que hay muchas otras interpretaciones de ella, además de las que me molestaban; muchos otros significados que la gente le asigna. Así que decidí repensar —o reconsiderar— la dichosa palabra, para ver si podía descubrir algunos significados que me dijeran algo; algunas experiencias en mi vida que no son realmente religiosas (al menos no en el sentido tradicional), pero podrían ser ...bueno, espirituales.He aquí algo de lo que descubrí. Podrías llamarlo mi, "Espiritualidad más allá de Dios" —o sin Dios. Podría ser la mejor palabra para describir un acontecimiento indescriptible como una puesta de sol, la fragancia de una rosa, caminar a solas en un bosque tranquilo, estar enamorada, o la sensación de admiración al ver o experimentar algo maravilloso, o bello. Pienso que así habrá sentido Laurel Clark(5) cuando miró hacia fuera de la ventana del Columbia, y se embebió de la gloria de lo que aparecía ante sus ojos. Tal vez es así como nos conectamos con lo divino —con lo que sea que haya hecho este universo y todo lo que hay en él.Pienso que tal vez la espiritualidad es el sentimiento de conexión que tenemos los unos hacia los otros y hacia el todo. Se trata de la idea de que nunca estamos solos en realidad, de que no importa qué tan aislados y atomizados podamos sentirnos, somos parte de una vasta e interdependiente trama del ser; somos un pequeño pero importante engrane del mecanismo del mundo. Nunca estamos realmente separados del campo mismo de la existencia, y lo que mueve a una parte nos afecta a todos.Pienso que la espiritualidad consiste en estar en contacto con el núcleo mismo de nuestro ser. También es esforzarse para conseguir aquello que nos da sentido e integridad. Es una postura hacia la vida; una actitud que se origina dentro de uno mismo. No se deriva de ningunas creencias o prácticas, en particular, ni de hábitos heredados, ni de presiones sociales. Para lograr la espiritualidad, una persona debe estar alerta hacia su voz interior. Hablamos de espiritualidad en el arte, la música y la literatura, con lo que queremos decir que el artista, escritor, o compositor tiene una conciencia interior de lo que sobrepasa la vida ordinaria; ellos fueron capaces de ver más allá de lo mundano y dentro del espíritu de una cosa.Richard Erhardt sugiere que la espiritualidad se trata de cómo vivimos nuestras vidas. Él pregunta:
"¿Estamos enfocados o dispersos? ¿Estamos presentes en el aquí y el ahora o nuestra atención está dirigida hacia otro lado? ¿Continuamente nos desafiamos a nosotros mismos, a nuestras visiones del mundo, a nuestras actitudes y puntos de vista? ¿O tenemos tanto miedo de ser desafiados que nos oponemos frenéticamente a las corrientes del cambio? La cuestión espiritual realmente es, ¿Somos derribados por cada viento que sopla en nuestro camino, o nos mantenemos en pie, con firmeza y tranquilidad, donde estamos? Una persona que esté en contacto con su propia espiritualidad podría decir que hay una fuerza interior que la mantiene centrada e íntegra cuando todo el mundo a su alrededor intenta desintegrarla."(6)
Hay otro sentido en el que se puede entender que la espiritualidad tiene que ver con la manera en que vivimos nuestras vidas. Se trata de la manera que sugiere Sharon Welch para llevarnos a un compromiso con el mundo que nos rodea, y que abre vías para el activismo y el servicio. Se trata de usar nuestras experiencias para ofrecer las conexiones con otras personas y con la naturaleza que nos motiven a trabajar por la justicia, a honrar a esa naturaleza, y a servir a los otros. Sharon escribió:
"No creo en Dios. Nada sé de conceptos, símbolos o imágenes de Dios ...que me resulten creíbles intelectualmente, así como satisfactorios emocionalmente, o desafiantes éticamente, con vistas hacia la maldad y la complejidad de la vida. Pero sí sé, en cualquier caso, de prácticas espirituales que cambian nuestras vidas, que nos ayudan a ver en dónde nos equivocamos, que nos impulsan a trabajar por la justicia, que nos proporcionan una noción de sentido y gozo ... No tienes que creer en Dios para servir a Dios"(7)
"¿Estamos enfocados o dispersos? ¿Estamos presentes en el aquí y el ahora o nuestra atención está dirigida hacia otro lado? ¿Continuamente nos desafiamos a nosotros mismos, a nuestras visiones del mundo, a nuestras actitudes y puntos de vista? ¿O tenemos tanto miedo de ser desafiados que nos oponemos frenéticamente a las corrientes del cambio? La cuestión espiritual realmente es, ¿Somos derribados por cada viento que sopla en nuestro camino, o nos mantenemos en pie, con firmeza y tranquilidad, donde estamos? Una persona que esté en contacto con su propia espiritualidad podría decir que hay una fuerza interior que la mantiene centrada e íntegra cuando todo el mundo a su alrededor intenta desintegrarla."(6)
Hay otro sentido en el que se puede entender que la espiritualidad tiene que ver con la manera en que vivimos nuestras vidas. Se trata de la manera que sugiere Sharon Welch para llevarnos a un compromiso con el mundo que nos rodea, y que abre vías para el activismo y el servicio. Se trata de usar nuestras experiencias para ofrecer las conexiones con otras personas y con la naturaleza que nos motiven a trabajar por la justicia, a honrar a esa naturaleza, y a servir a los otros. Sharon escribió:
"No creo en Dios. Nada sé de conceptos, símbolos o imágenes de Dios ...que me resulten creíbles intelectualmente, así como satisfactorios emocionalmente, o desafiantes éticamente, con vistas hacia la maldad y la complejidad de la vida. Pero sí sé, en cualquier caso, de prácticas espirituales que cambian nuestras vidas, que nos ayudan a ver en dónde nos equivocamos, que nos impulsan a trabajar por la justicia, que nos proporcionan una noción de sentido y gozo ... No tienes que creer en Dios para servir a Dios"(7)
~~~~~~~~~~~~~~NOTAS FINALES~~~~~~~~~~~~~~
(1) mantra. (Del sánscr. mantra, literalmente, 'pensamiento'). 1. m. En el hinduismo y en el budismo, sílabas, palabras o frases sagradas, generalmente en sánscrito, que se recitan durante el culto para invocar a la divinidad o como apoyo de la meditación. www.rae.es <http://www.rae.es/>(2) wicca. Es una forma de neopaganismo relacionada con el shamanismo y que incluye diferentes formas de magia blanca. Es una forma de religión basada en cultos de la Tierra (de acuerdo con tradiciones precristianas reconstriudas de la Europa Occidental).(3) New Age. Movimiento espiritual que fluye casi totalmente descentralizado y desorganizado. Está compuesto por librerías metafísicas, conferencistas estelares, autores, maestros y usuarios / creyentes de una gran variedad de técnicas, tales como channeling o canalizar (= Proceso de recibir información o inspiración, desde planos más allá de nuestra realidad física), regresiones a vidas pasadas, piramidología, poder de los cristales, la meditación de los ángeles, etc.(4) "El pueblo congelado de Dios" es una alusión desdeñosa hacia una religiosidad poco relacionada con la vida cotidiana, intelectualista o demasiado fría. En inglés es un juego de palabras, en vez de "pueblo elegido de Dios", "chosen people of God", se usa "pueblo congelado de Dios", "frozen people of God".(5) La Dra. Laurel Blair Salton Clark fue médico especialista de misión en el último y malogrado vuelo del transbordador espacial Columbia (Misión STS-107, 1° de febrero de 2003). Fue Unitaria Universalista practicante.(6) Rev. Richard Erhardt, "A Vision of Spirituality," First Days Record, January 1998.(7) Sharon Welch, "Spirituality Without God," Meadville Lombard Newsletter, 21:1, Spring, 2002.(8) Alusión al célebre diccionario Webster's de inglés-inglés en su variante usamericana.(9) David Bumbaugh, First Days Record, January 1997.(10) Farley Wheelwright, "Oh no! Not Spirituality Again," First Days Record, October, 1997.Véanse también:Revdo Peter Morales:
¿Qué es, a fin de cuentas, la espiritualidad?
Revdo Peter Morales:
El final de la fe