sábado, 29 de noviembre de 2008

Características típicas de los Prianistas‏

¿Acaso habrá algún panista con un poco de vergüenza?
081125 – Felipe Daniel Ruanova Zárate – fdrz@prodigy.net.mx

En 20 años en los que el PAN ha gobernado el Estado de Baja California, cuyo trágico saldo no se los voy a restregar, porque todos los días lo vivimos en los hechos, en la prensa y los noticieros. En estos últimos 20 años, los panistas, de ser unos pobres diablos, que ni a empresarios llegaban, se han convertido en verdaderos millonarios, con fortunas inocultables, con casas nuevas, con autos blindados, panzones la mayoría de ellos, algunos hasta de señora mejoraron, muchos, ya tienen su casa de fin de semana en territorio estadounidense, todos siguen rezándole al dios del Vaticano: No ha habido acusación alguna en contra de algún panista por peculado, y todas las cuentas públicas (las que publican) han resultado ser inmaculadas. Ningún panista “ha salido del clóset” declarándose homosexual y todos los días llenan los periódicos y noticieros de radio y televisión de espectaculares logros y envidiables avances a favor del empleo, en contra de la pobreza, y por sobre todo lo demás, “la gran cruzada panista en contra de la delincuencia”, que es de envidia nacional e internacional.

En éste último rubro, los panistas han sabido engañar recurrentemente a la población. Al principio de sus gestiones, al finalizar los 80’s y durante los 90’s, todos los delincuentes “eran herencia de los priístas”. Ya a nivel estatal, para el panismo en el poder, los delitos graves “eran federales”. Pero al inicio del siglo, cuando aparentemente se les habrían acabado las excusas, la criminalidad pasó a ser meramente “un asunto policiaco”, o más que otra cosa, “eventos exclusivos de las mafias”. A los panistas, al final de cuentas, se les resbala fácil, todo lo que los pueda implicar en lo delictivo.

El panista de todos los tiempos siempre repudió al gobierno y al PRI. Y los viejos panistas, que ya no alcanzaron cargos significativos en las administraciones públicas que primeramente les fueron dadas gratuitamente, por el inefable Carlos Salinas de Gortari, sin duda el mayor promotor del PAN de la Historia de México, permitió que fueran llegando “sin el voto popular mayoritario”, a diversos cargos en los gobiernos locales primero, luego estatales, y a partir del año 2000, en todo el gobierno federal.

En cada posición ganada, sea por dádiva (citadas como “concertasesión”), o por voto democrático, es ya sabido, no fueron las honestas administraciones y menos las obras gubernamentales, lo que les permitió mantener tales posiciones gubernamentales, sino las enormes dosis de propaganda en paralelo, en todas las formas posibles (legales o ilegales), que se adjudicaron con cargo al erario.

Así, la supuesta Democracia que traería el tan anhelado “cambio”, se tradujo en los hechos, como la gran desilusión de la población en todos los órdenes. El estado de cosas tan funesto que vivimos hoy día, merced a esos 20 años de gobiernos panistas en Baja California y 8 en el ámbito federal, no se puede comparar con ninguna época del priísmo, si acaso, al de la confrontación cristera, que surgió a finales del los 20’s, en la época en la que el PRI aún no existía. Pero en ninguna época anterior se produjo el fraude electoral de la proporción a como se dio en el año 2006, cuyas consecuencias aún no acabamos de enfrentar, y mucho menos de evaluar en cuanto a las desgracias aún por venir.

Existe pues una enorme distancia, dada ésta en términos de lo moral, entre lo que los viejos panistas ofrecían, y lo que los “nuevos panistas le están surtiendo a la ciudadanía”. No es una cuestión en la que las ideologías sean cuestionadas, puesto que éstas ni siquiera se exhiben, menos se debaten, tampoco se evalúan los “modelos capitalistas o socialistas”, que se fecundan en todo el orbe, no, con los panistas no hemos empezado ni siquiera a cuestionarlos por lo más importante, que resulta ser lo fundamental: Estos es, su condición moral y ética para ser gobierno. Ya sabemos que en lo que se refiere al Partido Acción Nacional, éste se conduce articuladamente y con precisión óptima, a lo que es un “Partido fascista* en el gobierno” (* Ver nota al calce). Reñidos que están los panistas con la Historia real, no le confieren al Ciudadano lo que éste anhela… “sino todo lo contrario”. Lo que queremos es vivir en paz y eso sólo se logra cuando el gobernante actúa con vergüenza. Doy fe.
Las 14 características del fascismo
http://www.worldcantwait-la.com/14_fascismo.htm

El Dr. Laurence Britt, politólogo, escribió un artículo acerca del fascismo que apareció en la revista Free Inquiry, una revista de corte humanista. El Dr. Britt estudió los regímenes fascistas de Hitler (Alemania), Mussolini (Italia), Franco (España), Suharto (Indonesia) y Pinochet (Chile). Él encontró que estos regímenes tienen 14 puntos en común, los cuales llamó: "las características que identifican al fascismo".

Las catorce características son:
Nacionalismo poderoso y permanente.
Disgusto por el reconocimiento de los Derechos Humanos.
Identificación de los enemigos o chivos expiatorios como una causa unificada.
Supremacía de lo militar.
Sexismo rampante.
Control de los medios de comunicación.
Obsesión con la Seguridad Nacional.
La religión y el gobierno están entremezclados.
El poder corporativo es protegido.
El poder laboral es suprimido.
Desprecio por los intelectuales y las Artes.
Obsesión con el crimen y el castigo.
Rampante amiguismo y corrupción.
Elecciones fraudulentas.

Breves definiciones o precisiones:

1. Nacionalismo poderoso y permanente.
Los regímenes fascistas tienden a hacer constantes el uso de frases, slogan, símbolos, canciones y otra parafernalia patriótica. Las banderas se ven por todos lados, así como los símbolos de la bandera en ropa y desplegada públicamente.
2. Disgusto por el reconocimiento de los Derechos Humanos.
Debido al miedo a los enemigos y a la necesidad de seguridad, el pueblo en los regímenes fascistas es persuadido que los Derechos Humanos deben ser ignorados, en algunos casos por "necesidad". El pueblo tiende a mirar de otra forma e inclusive a aprobar la tortura, ejecuciones sumáriales, asesinatos, largas encarcelaciones de prisioneros etc.
3. Identificación de los enemigos o chivos expiatorios como una causa unificada.
El pueblo es conducido a un frenesí patriótico sobre la necesidad de eliminar un peligro percibido como común en forma de enemigo, ya sean las minorías raciales, étnicas, religiosas, liberales, comunistas, socialistas, terroristas etc.
4. Supremacía de lo militar.
Aunque existan muchos problemas domésticos, a los militares se les da una cantidad desproporcionada de soporte financiero y la agenda domestica es descuidada. Soldados y militares en servicio son vistos como glamorosos.
5. Sexismo rampante.
El gobierno de las naciones fascistas tiende a ser dominado casi en su totalidad por el sexo masculino. Bajo los regímenes fascistas tradicionales, se hace más rígida la importancia del género. La oposición al aborto es alta, así como la homofobia y las legislaciones anti gay en la política nacional.
6. Control de los medios de comunicación.
Algunas veces los medios son controlados directamente por el gobierno, en otros casos los medios son controlados indirectamente por las regulaciones gubernamentales, o por persuasión a los periodistas y censura a los ejecutivos, especialmente en tiempos de guerra.
7. Obsesión con la Seguridad Nacional.
El miedo es usado como una arma motivacional por el gobierno para controlar las masas.
8. La religión y el gobierno están entremezclados.
Los gobiernos en las naciones fascistas tienden a usar la religión predominante en el país como arma de manipulación de la opinión pública. La retórica religiosa y la terminología común (ej.: el bien común) es usada por los líderes del gobierno, aun cuando los jerarcas religiosos estén diametralmente opuestos a las acciones y políticas del gobierno.
9. El poder corporativo es protegido.
La aristocracia industrial y de los negocios de las naciones fascistas usualmente son quienes ponen a los líderes del gobierno en el poder, creando una beneficiosa relación empresas/gobierno con la elite de poder.
10. El poder Laboral es suprimido.
Porque las organizaciones de poder laboral son las únicas amenazas de los gobiernos fascistas, los sindicatos y asociaciones laborales son eliminados.
11. Desprecio por los intelectuales y las Artes.
Las naciones fascistas tienden a promover y tolerar una abierta hostilidad a la educación superior y la academia. No es poco común que profesores y otros académicos sean censurados e inclusive arrestados. La expresión libre del arte es atacada y los gobiernos usualmente se rehúsan a financiar las artes.
12. Obsesión con el crimen y el castigo.
Bajo los regímenes fascistas se le dan poderes casi ilimitados a las fuerzas represivas legales. La gente a menudo es obligada a hacerse la vista gorda sobre los abusos policiales e inclusive a abandonar libertades civiles en el nombre del patriotismo. Existe a menudo una fuerza policial nacional con poderes ilimitados en naciones fascistas.
13. Rampante amiguismo y corrupción.
Los regímenes fascistas casi siempre gobiernan con grupos de amigos y asociados que se posicionan unos y otros en los cargos gubernamentales y usan el poder gubernamental y la autoridad para proteger a sus amigos de la responsabilidad de rendir cuentas. No es infrecuente que en los regímenes fascistas los líderes gubernamentales se apropien e inclusive roben descaradamente los recursos y tesoros nacionales.
14. Elecciones fraudulentas.
Algunas veces las elecciones en las naciones fascistas son un verdadero fraude. Otras veces las elecciones son manipuladas por campañas difamatorias en contra de los candidatos opositores e inclusive el asesinato de los mismos. También usan las legislaciones para el control del número de votos, el control político distrital y la manipulación de los medios de comunicación. Las naciones fascistas también usan típicamente a sus tribunales de justicia para manipular y controlar la elección.


Menos mal… Debemos agradecerle a la Virgen de Guadalupe, porque los panistas no sean así… FDRZ