Las 34 instalaciones de la extinta Compañía de Luz y Fuerza (CLyF) que hay en el valle de Toluca, fueron “tomadas” simbólicamente por trabajadores del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) que colocaron banderas rojinegras en accesos principales, para demandar la revisión de su “contrato” colectivo de trabajo, así como la reinstalación de sus fuentes laborales y la renuncia de Javier Lozano, titular de la Secretaria del Trabajo en el gobierno federal.
Los ex trabajadores son apoyados por estudiantes de la entidad, comerciantes informales, asociaciones civiles y colonos de municipios como Lerma, quienes se apostaron a las afueras de subestaciones eléctricas, almacenes y oficinas administrativas, en las que hasta hace cinco meses con diez días estaban laborando.
“Nadie entra y nadie sale de los Centros de trabajo. Esa es la huelga y estamos actuando conforme a derecho, es una huelga legal (pero) simbólica y contamos con nuestro amparo para el estallido y parar labores y proceder a revisar el contrato colectivo de trabajo”, comentó Gustavo Anaya Maya, secretario general del SME en el Valle de Toluca.
Precisó que las brigadas que estarán a las afueras de las instalaciones de la extinta CLyF, son conformadas por veinte trabajadores sindicalizados, los cuales se darán a la tarea de impedir el acceso a cualquier persona que pretenda laboral en las instalaciones.
No obstante, Anaya Maya, admitió que de por ningún motivo estarían en la idea de generar un enfrentamiento con los elementos de la Policía Federal que también están en las inmediaciones de las instalaciones de la extinta CLyF y declaró que estarán impidiendo a la fuerza la entrada de ninguna persona.
