jueves, 12 de agosto de 2010

Fortalecer y armonizar relaciones humanas, hoy más importante que nunca: ICAT

  • Publinota
  • Leonardo Bastida
    México DF, agosto 12 de 2010.
    La experiencia de trabajo en los centros comunitarios de Canadá por seis años permitieron a Víctor Iñigo, fundador del Instituto de Consejería y Análisis del Temperamento (ICAT) conocer diversos métodos para que personas con distintos orígenes culturales pudieran entablar una comunicación exitosa con otros miembros de la sociedad. El más prolífico: el análisis de los temperamentos.
    Por medio de la consejería y el conocimiento de los distintos temperamentos de las personas, es posible que los miembros de una comunidad que pasan por experiencias similares puedan apoyarse a través de redes comunitarias en las que sus integrantes se respalden entre sí.
    Para lograr este objetivo, explica Iñigo, es necesario promover la autodeterminación de las personas desarrollando habilidades y formando redes de apoyo en la misma comunidad.
    Víctor Íñigo agrega que mediante este principio se aplican los conceptos de consejería y análisis de temperamento, que parten del hecho de que una persona se conozca a sí misma para autodeterminarse y a partir de ahí, sensibilizarse con los demás.
    Reconocer las características propias del temperamento y también las de los otros es el medio por el cual se establece un puente de comunicación en el que ambas personas se conocen y saben su manera de interactuar.
    Aprender a conocer los temperamentos permite que se brinde una consejería a nivel individual o grupal para tener una mejor interacción como persona y como equipo de trabajo.
    Para ICAT, es muy importante que las personas interesadas en el análisis de los temperamentos se conviertan en replicadores de la información y pasen a ser parte de una red comunitaria de apoyo a muchos sectores.
    Por lo tanto, ofrece tres talleres básicos en los que el interesado aprenderá a conocer qué son los temperamentos, a distinguir cada uno de ellos, las interacciones que existen entre estos, y a desarrollar habilidades para la vida y así aplicar lo aprendido en torno al temperamento.
    Víctor Iñigo explicó que estas técnicas pueden ser muy útiles para dar consejería a las personas que viven con VIH y se pueden obtener excelentes resultados mediante el establecimiento de puentes de comunicación sólidos y efectivos.
    Para quienes deseen convertirse en replicadores de los talleres y ahondar más en esta teoría, ICAT ofrece la Certificación de Consejería Avanzada y Análisis del Temperamento, que inicia en este mes de agosto.
    Los interesados desarrollarán las habilidades necesarias para establecer relaciones de ayuda eficaces. Tendrán habilidades de comunicación efectiva que puedan aplicar en su entorno personal, social, ocupacional y profesional. Promoverán el desarrollo de conductas balanceadamente autodeterminadas, así como aprenderán a respetar la individualidad de los otros y conocerán métodos claros para transmitir este conocimiento a los demás.
    Quienes deseen acudir a este proceso formativo que sin duda incidirá en tu vida profesional y personal, deberán comunicarse al Instituto de Consejería y Análisis de Temperamento, ubicado en calle Colima número 76-C, colonia Roma, México Distrito Federal, o comunicarse al teléfono (01-55) 5208-5408. La página electrónica del ICAT es www.icat.org.mx