viernes, 27 de mayo de 2011

Exigen mejor trato para familias víctimas de feminicidios en Chihuahua

  • “En muchos casos las técnicas de las instituciones del gobierno hacen sentir a los familiares culpables”, activista
  • Por segundo año consecutivo la Fundación Pfizer premia el desempeño de “Justicia Para Nuestras Hijas”
  • Luis Méndez Pérez
    México DF, mayo 23 de 2011.

    La desaparición o muerte violenta de mujeres en Chihuahua genera en las familias un impacto que les cambia la vida, ocasiona traumas emocionales y en los peores casos intentos de suicidio o desarrollo de enfermedades como la diabetes.

    Por esta razón, el proyecto “Compartiendo el dolor y la esperanza, talleres de acompañamiento psicosocial”, de la asociación civil Justicia Para Nuestras Hijas, del estado de Chihuahua, busca trabajar con familiares de las víctimas para encaminar sus sentimientos y emociones a cuestiones más positivas, señaló Irene Miramontes, directora de Desarrollo.

    “Si bien no es un hecho que se puede borrar, ni algo que se pueda olvidar, buscamos mediante la técnica de acompañamiento psicosocial que tanto las madres como las familias puedan vivir de una manera en que no dañen su forma de vida posterior al suceso”.

    Durante la premiación de la Séptima Convocatoria para Proyectos Sociales 2011 realizada por la Fundación Pfizer, se mencionó el trabajo de la organización que coordina Norma Ledezma Ortega, la cual obtiene por segundo año consecutivo el apoyo para realizar proyectos en beneficio de su estado.

    La asociación, hasta la segunda quincena de mayo ha contabilizado cerca de 152 feminicidios en Chihuahua, dicho conteo se realizó debido al primer apoyo que recibieron en 2010 por el proyecto “Observatorio Estatal del Feminicidio” el cual ya tiene documentados mil 200 casos de asesinatos de mujeres de 1993 al año en curso y 250 desaparecidas.

    “El proyecto tiene como objetivo realizar una cifra más correcta y certera de los feminicidios desde 1993 hasta la fecha en el estado, mediante una revisión hemerográfica y solicitar información pública a través del Instituto de Transparencia e Información Pública de Chihuahua, se logró certeza en los números de asesinatos”, mencionó Miramontes Montes.

    La solicitud de información fue una “batalla” debido a que el principio la Fiscalía General de Chihuahua, se mostró reacia a dar y entregar la información o la entregaba ilegible, sin embargo, se logró iniciar el conteo y saber con mayor claridad sobre la problemática que aqueja a uno de los estados donde se cometen más feminicidios de acuerdo al Observatorio Ciudadano Nacional de Feminicidios.

    Además de contar con la información de las jóvenes que están desaparecidas se creó un espacio en el portal de la asociación para que la ciudadanía pueda ver la información y si conoce o sabe algo sobre el paradero de las mujeres desaparecidas pueda informarlo a la organización.

    Justicia para Nuestras Hijas nació a raíz de la muerte de la hija de la fundadora Norma Ledezma Ortega, la joven Paloma Angélica, desaparecida en 2002 y posteriormente encontrada sin vida, por lo que su madre creo la organización para exigir justicia para todas las mujeres asesinadas.

    “La causa y lucha de la asociación se sembró con sangre, no fue algo que se haya decidido, que se planeara, iniciamos por la necesidad de la lucha de la organización comenzó por que la necesidad de justicia lo hizo”, enfatizó Miramontes Montes

    Actualmente, la organización representa legalmente 52 casos, de los cuales 28 son feminicidios y 24 desapariciones, “la representación legal radica en que nos involucramos principalmente en lo que es la investigación, es decir ejercemos el derecho de coadyuvancia que nos da la Constitución Política de México, hacemos investigación directa trabajamos con los ministerios públicos y los agentes ministeriales, participamos desde la interrogación de los testigos hasta los rastreos, cualquier tipo de diligencia”, explicó.

    Otra de las actividades realizadas junto con la Fiscalía es una rendición de cuentas sobre la investigación a las familias, a las cuales se les dedica una hora a cada familia mediante mesas de trabajo, para explicarles los avances de la investigación y las posibles estrategias a realizar de manera coordinada.

    Es la segunda ocasión de Fundación Pfizer premia a la organización que con este proyecto busca generar un bienestar para el dolor causado por los feminicidios en los miembros de las familias, mediante la técnica del acompañamiento psicosocial.

    “El apoyo ayuda a crear herramientas para continuar la lucha, nos queda claro que las mamás, las familias de las jóvenes, van a continuar la lucha con o sin recursos, es por ello que ya propusimos que el gobierno de Chihuahua se capacite con esta técnica”, señaló la directora de Desarrollo.

    Irene Miramontes aseveró que a pesar de que las instituciones brindan ayuda, utilizan técnicas que ya no funcionan para las víctimas pues en algunos casos se encargan de que los familiares se sientan culpables por la muerte o desaparición de su hija, madre, esposa o hermana, al decirles que las dejaron solas o usaban faldas muy cortas, por ello es necesario el acompañamiento psicosocial que explica los derechos de la víctima y de la familia.

    “Lo que se hace es una reflexión sobre las causas de haber vivido un hecho de esta magnitud, se explica que vivimos en una sociedad patriarcal con estereotipos que ponen en vulnerabilidad a las mujeres, toda esta reflexión ayuda a la familias para evitar la auto-culpabilidad”, concluyó.