sábado, 23 de junio de 2007

Asesinan a 3 homosexuales cada mes en México: estudio

Asesinan a 3 homosexuales cada mes en México: estudio
AFP
México, D.F. Pese a la reciente legalización de la unión de parejas del mismo sexo en la ciudad de México y el estado de Coahuila, la homofobia sigue latente en el país con tres asesinatos de homosexuales en promedio al mes, además de constantes agresiones físicas y verbales.
"Cada mes, se registran en promedio tres asesinatos de homosexuales (hombres) en México, por su condición de ser homosexuales, y esto está documentado", dijo Fernando del Collado, autor del libro Homofobia, odio, crimen y justicia, que recoge los casos de 387 asesinatos de homosexuales ocurridos en México de 1995 a 2005.
El escritor y periodista aseguró además que por cada caso documentado, se estima que existen tres en torno a los cuales no se pueden reunir pruebas debido a la negligencia de las autoridades de procuración de justicia, en las que, aseguró, aún existe un profundo "prejuicio homofóbico" resultado de una "cultura machista".
"El 98% de los crímenes contra homosexuales sigue estando impune. Los pocos casos en que se ha detenido a los asesinos es porque las familias, que son acosadas por los policías, mantienen la lucha para que se llegue hasta el final", añadió.
La homofobia empieza incluso en el seno familiar, comentó Del Collado, ya que una comisión ciudadana que se dio a la tarea de investigar crímenes de homosexuales solicitó en 2004 el apoyo de familiares de 26 víctimas de crímenes homofóbicos y sólo en seis prestaron ayuda.
En ese mismo año, el servicio forense de la Ciudad de México identificó 125 cadáveres de homosexuales, 75 de los cuales fueron reclamados por los familiares. En 13 casos la familia sólo acudió a identificar el cuerpo y en los restantes ni siquiera se presentó pese a ser llamada por las autoridades.
Como termómetro de la homofobia en México, Del Collado citó la encuesta de valores universales realizada en 2006, la cual arrojó que uno de cada tres mexicanos siente aversión por los homosexuales, 40 por ciento no quiere a un dirigente político homosexual y a 32 por ciento no le gustaría tener a un vecino homosexual.
"Esta ley de sociedades de convivencia en la Ciudad de México y la de Coahuila son un avance, una muestra de tolerancia, pero la ley no se termina de empatar con la realidad social, se trata de una tolerancia engañosa", dijo Collado sobre las leyes recientemente aprobadas que permiten la unión de dos personas del mismo sexo.
Entre las lesbianas, la sensación de prejuicio y odio hacia su condición sexual también es latente, y si bien no existen registros de asesinatos similares a los de los hombres homosexuales, sí son constantes los casos de agresiones físicas, verbales y hasta sexuales, incluso de parte de policías.
"Hay casos de compañeras lesbianas que al ser detenidas y darse cuenta los policías de su preferencia sexual, las insultan, se burlan de ellas, las golpean o las manosean", explicó Rosa María Ortiz, presidenta del Grupo de Madres Lesbianas, una organización civil de la Ciudad de México.
Ortiz, que estuvo casada hasta que reconoció su preferencia sexual y tiene tres hijos, explica que como madre lesbiana enfrenta prejuicios como el ser acusada de buscar criar a sus hijos con una distinta preferencia sexual y que incluso en la visita al ginecólogo es víctima de un trato diferenciado.
En medio de este hostil ambiente para los homosexuales en México, existe un paraíso de tolerancia en Juchitán, del sureño estado de Oaxaca, donde travestis, llamados 'muxhes', gozan del respeto de su comunidad al ser considerados como un tercer sexo: hombre-mujer capaz de realizar las tareas de ambos sexos. De acuerdo a las costumbres de esa comunidad los hombres pueden tener encuentros sexuales con los 'muxhes' para reafirmar su heterosexualidad.