sábado, 1 de septiembre de 2007

Recuerdan a Diana en el 10o. aniversario de su muerte


La familia de Diana conmemoró el viernes el décimo aniversario de la muerte de la princesa en una ceremonia organizada por sus hijos, mientras sus admiradores depositaron veintenas de ramos de flores, poemas y retratos ante los portones de la que fue su residencia.

"Para nosotros, dos hijos amorosos, fue sencillamente la mejor madre del mundo", dijo en un panegírico el príncipe Enrique, su hijo menor. "Cuando estaba viva dábamos por sentado su amor por la vida, su risa, su gracia y sus bromas".

"Fue nuestra guardiana, amiga y protectora", agregó. "Nunca dejó de manifestar su amor inclaudicable por nosotros".

Durante la jornada los medios de comunicación transmitieron imágenes de la boda y del funeral de Diana, como también pasaron revista a los sinsabores de su unión con el príncipe Carlos.

Y previsiblemente volvieron a ventilarse hasta el cansancio las conjeturas sobre su muerte en un accidente de tránsito en París junto con su novio Dodi Fayed. El Daily Telegraph publicó un ensayo para explicar "por qué estábamos en lo cierto en llorar a Diana".

Enrique y su hermano, el príncipe Guillermo, fueron los responsables de organizar la ceremonia al mediodía en la Capilla de los Guardias cerca de Buckingham, pero muchos culparon a Carlos por el furor que suscitó una invitación a la actual esposa del príncipe.

Camila, a quien Diana culpó de haber arruinado su matrimonio, decidió quedarse en su casa. El Mail había publicado el domingo un comentario de una amiga de Diana, Rosa Monckton, de que la princesa se habría quedado "atónita" de que Camilla fuese invitada.

"Por cierto, se habría quedado atónita al enterarse de que su ex marido se casó con su antigua amante", escribió Monckton.

La primera boda de Camila, con Andrew Parker Bowles, había sido en la Capilla de los Guardias.
Unos pocos centenares de personas se habían reunido a media mañana frente al lugar de la ceremonia, en contraste con la multitud que se alineó a lo largo de la ruta de la procesión fúnebre de Diana a la abadía de Westminster hace diez años.

La reina Isabel II encabezó la lista de invitados a la ceremonia, junto con su marido, el príncipe consorte Felipe. El príncipe Eduardo, hermano menor de Carlos, y su hermana la princesa Ana, estaban en la congregación.

También asistieron el primer ministro Gordon Brown y el ex primer ministro John Major, al igual que el cantante Elton John.

Mohamed al Fayed, que acusa al príncipe Felipe de haber planeado la muerte de Diana y de su hijo Dodi Fayed, no estaba en la lista de invitados. Observó dos minutos de silencio en su enorme tienda por departamentos Harrods una hora antes de la ceremonia. Su hija Camila al Fayed asistió a la ceremonia oficial.