martes, 8 de enero de 2008

MAS DE CARMEN ARISTEGUI

La periodista mexicana Carmen Aristegui ha sido un importantísimo referente de la responsabilidad y compromiso de los comunicadores, al dar voz a todos los sectores de la sociedad, con especial énfasis en quienes han sido excluidos de los grandes reflectores y los micrófonos de las altas tribunas.
Carmen agrandó, como nadie, las posibilidades de la expresión y la opinión públicas, abriendo su espacio radiofónico a las causas que de otro modo no hubieran sido escuchadas: la de los campesinos e indígenas, la de víctimas de violencia sexista y pederasta, la de quienes se oponían a la censura de la libertad de expresión ante el poder monopólico de los grandes medios de comunicación y la de muchos mexicanos y mexicanas que han querido expresar su indignación ante los abusos del poder de los de arriba.
Es, justamente, la forma en que señaló y cuestionó a los poderes fácticos e institucionales lo que le cancela el contrato laboral del programa que dirigió durante cinco años en el consorcio radial de la empresa propiedad del grupo mexicano Televisa y del grupo español Prisa, bajo el pretexto de “incompatibilidad editorial”, lo cual deja de manifiesto la miseria moral de ambas empresas y la mediocridad analítica en la cual pretenden mantenernos.
Carmen fue acosada por su autonomía y compromiso. El suyo fue uno de los pocos espacios que respetaban a su audiencia con un trato crítico, inteligente y honesto. Sería muy interesante para el público en general que las empresas Televisa y Prisa expresaran con cuál de estos valores existe el diferendo editorial por el que Aristegui fue expulsada. Los abajo firmantes exigimos esa explicación.
Colectivo de Mexicanos en Resistencia desde Barcelona. Emmanuel González-Ortega, Diana Calderón Preciado, Arturo Landeros Suárez, Nasnia Oceransky, Juan Carlos Cabrera Sámano, Marlen Mendoza Morteo, Felipe Núñez, Aidée Arevalo, Gustavo Madrid, Paula Laverde Austin, Carlos López Aguirre y Adriana Uscanga Castillo
La comunicadora ofrecía otro sentido de vida
Hace tiempo ya, Eduardo Galeano explicaba el porqué del nombre de su colaboración con La Jornada, Ventanas. Y si mal no recuerdo, estaba vinculada con el sentido de la vida para una joven a quien el galán le escribía día con día algunos fragmentos capaces de impregnarle ganas de respirar y de vivir, porque le iluminaban un espacio que ella no conocía. A lo largo de un gran trecho los seguidores de este pensador tuvimos la oportunidad de leer y degustar sus frases, analogías y pensamientos, dándole un sentido mayor a nuestra realidad.
De la misma manera, a pesar de la paradoja que encierra en este México tan convulso y tan lleno de contrariedades, cada mañana escuchábamos una voz en medio del torbellino noticioso, expresando lo que nos parecía necesario discutir, comentar y compartir. Un espacio donde “la nota” o “la noticia” tenía un sesgo de crítica y de inteligencia en cada renglón analizado de nuestra historia actual; donde la labor periodística, por más que su función genuina sea formar conciencias, también se presenta difícil de ejercer, enmedio de las empresas que también cada vez más son poderosas y donde los periodistas y los comentaristas se comportan, muy a menudo, con actitudes lacayunas.
Al igual que Galeano, Carmen Aristegui le dio un sentido distinto a nuestra vida, a partir de la revisión de nuestra realidad día con día, dándonos también la oportunidad de expresarnos mediante sus palabras, su maravillosa forma de hacer entrevistas; a la hora de acotar temas, de señalar –a pesar de las incomodidades– a quienes igualmente señalará la historia. Enhorabuena querida Carmen, porque el presente te tiene un mejor lugar.
Martha López