jueves, 24 de enero de 2008

Red de Comunidades Autogestivas. Caféquidad por la Paz. Empresa Social Multinacional Global - FORO SOCIAL MUNDIAL‏

FORO SOCIAL MUNDIAL 2008
Acción local para el cambio global
FORO ECONOMIA SOLIDARIA
Otra economía es posible
Cd. de México, 22 al 26 de enero
Coalición de Fuerzas Productivas para el establecimiento de una Red de Comunidades Autogestivas. Caféquidad por la Paz. Empresa Social Multinacional Global
Todos sabemos que los veinticinco millones de pequeños productores y trabajadores del campo cafetalero en el mundo (quinientos mil en México) y sus familias generan una gran riqueza y viven en la pobreza, muchas veces extrema. Esto no es ética, política, económica, social y culturalmente aceptable ¿y cómo -con qué medidas correctivas específicas- es que sacaremos de su “condición” a los pobres del café?
- Perogrullo: cambiando las condiciones objetivas y subjetivas que los mantienen en tal situación.
Condiciones subjetivas.- modelo de pensamiento que se caracteriza por una actitud pesimista y escéptica ante la vida, subordinación fatalista ante el destino, ignorancia y resignación, no obstante una cultura histórica secular, caracterizada por la perseverancia y el estoicismo.
Condiciones objetivas.- limitación de oportunidades a causa de la desnutrición y la enfermedad, falta de capacidad competitiva frente a quienes no remuneran equitativamente su trabajo y les pagan bajos precios y salarios; baja productividad por reducida escala y ausencia de innovación tecnológica.
Así las cosas, son necesarias medidas correctivas específicas: educación y capacitación, organización, crédito y capitalización, equilibrar imperfecciones monopólicas del mercado y generar valor agregado por parte de los productores. Realizarlo a través de la Red que proponemos sin desatenderse de una política pública de Estado.
Como objetivo concreto llegar a constituir la Empresa Social Multinacional Global, iniciativa de gran escala integrada por pequeños productores minifundistas asociados para lograr productividad, dar escala competitiva comercial y manufacturera y equilibrar sus condiciones de negociación con las grandes corporaciones transnacionales que dominan la industria del café y otros productos básicos.

Por Fausto Cantú Peña
Coordinador Nacional, Constitución y República, Nuevo Milenio, A.C.
Agrupación Ciudadana de Análisis, Debate y Propuesta. Plural, Diversa y Apartidista
Ex Director del Instituto Mexicano del Café y Ex Presidente del Consejo Internacional del Café
Coalición de Fuerzas Productivas para el establecimiento de una Red de Comunidades Autogestivas. Caféquidad por la Paz. Empresa Social Multinacional Global
En las condiciones actuales del desarrollo nacional, ubicado en un proceso de globalización y formación de bloques geo-económico-políticos, es necesario impulsar de manera decidida y contundente a nuestras fuerzas productivas en todos los órdenes.
Nos referimos en especial a las fuerzas productivas del campo mexicano, las cuales muestran un gran atraso acentuado en los últimos años que no escapan a una situación mundial también con problemas en los países en vías de desarrollo.
Ejemplificamos con el caso concreto de la caficultura donde la planta agrícola y de beneficio se encuentra en su mayor parte deteriorada y descapitalizada; los recursos humanos están dispersos y poco preparados para enfrentar las exigencias de un mercado mundial con sobreproducción, cotizaciones internacionales que la mayor parte del tiempo no compensan el costo de producción, estrechez de mercado interno nacional y un oligopolio que limita la expansión de las fuerzas productivas.
El café es el resultado del esfuerzo y sufrimiento de millones de pequeños agricultores, campesinos y jornaleros pobres del trópico húmedo –pulmón del planeta, reserva de la biosfera, alimento de los ecosistemas- el cual estimula y deleita a mil doscientos millones de congéneres; es el producto más globalizado, su industria representa decenas de miles de millones de dólares tanto en inversiones como en transacciones anuales y enriquece a unas cuantas empresas transnacionales.
Ya no es posible tratar de resolver el serio problema de la caficultura, mediante información y promoción de datos y cifras dudosas, de representaciones discutibles y políticas públicas desacertadas.
La crisis estructural del café es una realidad, una amarga verdad, es obra de los gobiernos al proteger a las grandes corporaciones trasnacionales, las cuales dominan el mercado nacional e internacional, que constituyen la demanda y dan como resultado la miseria de miles de productores y trabajadores del campo cafetalero que conforman la oferta, quienes no son remunerados en sus costos de producción ni en salarios; por su parte los consumidores -que disfrutan la bebida- en nada se benefician de los bajos precios pagados a quienes hacen en su origen la riqueza del café.
Desde luego la tendencia no se detiene, sino que continúa con el deterioro en la planta productiva del cultivo mismo, con grave repercusión en los ecosistemas naturales y sociales. El globalitarismo, el supuesto “libre comercio” y la biotecnología transgénica de manera gradual irán sometiendo todavía más al pequeño productor, si este no se organiza para competir en gran escala, con criterios sustentables en la montaña del trópico húmedo.
Además, quienes son responsables de la política económica y los supuestos representantes de los productores, ignoran o no quieren entender que: debe ser el correcto usufructo y aprovechamiento de la tierra y no solamente su propiedad, más el trabajo que se agrega sobre ella para obtener el fruto, la principal garantía a efecto de conseguir financiamiento y aumentar la productividad. A su vez al no saber o no querer defender el precio de la materia prima en los mercados o no darle valor agregado, limitan su capacidad de repago y de generación de excedentes para su capitalización.
El diagnostico de la cafeticultura mexicana hasta donde las estadísticas y la realidad nos permiten conocer es muy compleja, pero se resume en: minifundismo y monocultivo, material vegetativo y suficiente y a veces deficiente, información y estadísticas incongruentes, descapitalización, financiamiento insuficiente e inoportuno, desaparición de organismos difusores de las técnicas de producción, desaparición gradual de la cafeticultura, políticas contradictorias en comercialización limitaciones culturales y educativas de los productores, lideres en su actuación discutibles, organizaciones productivas ineficientes bajo rendimientos por hectárea y calidades defectuosas, oferta desorganizada y demanda organizada, ausencia de leyes adecuadas para protección y apoyo de este sector.
Por lo anterior, es urgente y necesario contar con una política pública de Estado incluyente, con la real participación de los productores y trabajadores del campo cafetalero, a efecto de mejorar su condición humana y nivel de vida. Se trata de seguir aportando riqueza a la nación y supervivencia a los ecosistemas naturales y sociales del mundo mediante un programa permanente de desarrollo rural integral en las zonas cafetaleras.
Mientras tanto aboquémonos a la tarea de construir la Coalición de Fuerzas Productivas para el establecimiento de una Red de Comunidades Autogestivas. Caféquidad por la Paz y la Empresa Social Multinacional Global con los propósitos siguientes:
Ö Coadyuvar en la dinamización de la oferta nacional impulsando el cabal aprovechamiento de vastos recursos humanos, naturales y de capital a modo de lograr más altos niveles de Intercambio, productividad y sostenibilidad, generando ocupación y ampliando el poder de compra de la población.
Ö Fortalecer los mercados regionales y dentro de estos, la integración de cadenas productivas, la cooperación en los sectores sociales para lograr escalas y niveles competitivos y la educación gerencial – empresarial basada en proyectos específicos de inversión, a efecto de desarrollar nuestro mercado interno e insertarnos eficaz y dignamente en el proceso de mundialización.
Ö Promover inversiones, empleo y educación productiva en las distintas regiones geoeconómicas del país, enfatizando en proyectos estratégicos orientados principal, aunque no exclusivamente- al fortalecimiento del sector social de la economía.
Ö Buscar oportunidades de realización digna por la vía de la autogestión comunitaria.
Ö Lograr que los precios pagados por el último consumidor remuneren equitativamente a quienes hacen posible en su origen la riqueza del café, es decir, los productores y trabajadores del aromático. Hacer llegar los productos directamente a los mercados nacionales e internacionales para lograr mejor pago por el trabajo y precios remunerativos a los frutos de la tierra.
Ö
3Solicitar ante la Organización Internacional del Café (OIC), la Asociación de Países Productores de Café (APPC), la Organización Mundial del Comercio (OMC), las Leyes de Competencia Económica de los países productores y consumidores, el Banco Mundial y otros Organismos Internacionales, un trato equitativo. CAFÉQUIDAD, para conseguir un precio remunerativo que compense los costos de producción y libere un remanente a los productores así como un salario mínimo justo a quienes incorporan su trabajo en el campo cafetalero.
Ö Crear una conciencia nacional y universal para que los grandes beneficiarios del negocio retornen a los productores y trabajadores del campo algo de sus excesivas ganancias, al comprar tan barata la materia prima y no bajar sus precios al consumidor, a modo de recapitalizar el campo cafetalero y hacer efectivos en términos reales los derechos humanos de los campesinos cafetaleros, mejorando su nivel de vida y su capacidad de generar productividad.
Ö Demandar al Gobierno de la República en sus diferentes ámbitos y niveles, que defienda el precio internacional del café, combata la intermediación abusiva y usurera, y apoye a fondo el desarrollo integral, humano y natural de la cafeticultura mediante una política pública de Estado y la legislación correspondiente.
Ö Propiciar que los productores rurales obtengan la cultura del ahorro, mediante este mecanismo propio que les asegure la generación de un flujo de efectivo continuo que les permita cubrir oportunamente algunas contingencias a que estén expuestos en la actividad. Lo anterior a través de la Unión Financiera de Productores (Intermediaria Financiera Rural o dispersora de créditos) integrada por los propios productores quienes serán los socios y beneficiarios de las mismas.
Ö Preparar dirigentes productivos de empresas del sector social a través de la Agroindustria Escuela del Café, cuyo proceso enseñanza-aprendizaje será teórico-practico, instituida como un concepto dinámico para que a través del sistema educativo se genere la nueva cultura del café y el aprovechamiento de los cultivos asociados a los ecosistemas tropicales.
Ö Organizar a los productores en figuras jurídicas asociativas empresariales y autogestivas del sector social en cada una de sus municipios, comunidades, rancherías e integrarlas regionalmente sobre bases democráticas; cada comunidad elegirá la(s) figura(s) jurídica asociativa que considere conveniente.
Ö Capacitar técnica y en forma permanente para que en el beneficiado del café verde y en la torrefacción obtengan las calidades que la competencia del mercado exigen y producir con altos rendimientos y calidad usando las más altas tecnologías.
Ö Proporcionar asesoría técnica especializada para el mejoramiento de los beneficios,
Ö Promover la recapitalización de la parcela,
Ö Proporcionar asesoría para agregar valor al producto mediante la torrefacción y la industrialización,
Ö Proporcionar asesoría y representación para una eficaz comercialización en verde, mediante un esquema de agencia comercial donde la preparación del grano su certificación y cotización correspondiente permitan acceder a los mercados de especialidad y a las Bolsas de Mercaderías como la Bolsa del Café, Azúcar y Cacao de Nueva York (NYCSCE) y otros mercados organizados.
Ö Gestionar créditos suficientes, oportunos y baratos (mismos que se pagarán puntualmente),
Ö Gestionar la obtención de abasto popular en paquetes familiares de consumo en volumen (nutrición, herramientas, fertilizantes, etc.) para comprarlos a precios más bajos que en plaza.
Ö Constituir una organización a nivel regional que se interrelacione con otras similares.
Ö Proporcionar asesoría Legal permanente.
La Coalición de Fuerzas Productivas para el establecimiento de una Red de Comunidades Autogestivas. Caféquidad por la Paz y la Empresa Social Multinacional Global estará formada por auténticos productores de café; quienes participarán voluntariamente; radicando en el municipio, comunidad, ranchería o congregación; demostrando la medida de su parcela o propiedad; certificando el volumen de producción, sea en forma individual o de organización constituida; en caso de ser organización constituida, presentando el Acta Constitutiva; demostrando ser una persona honrada y confiable; comprometiéndose a proteger el medio ambiente.
La Coalición de Fuerzas Productivas para el establecimiento de una Red de Comunidades Autogestivas. Caféquidad por la Paz y la Empresa Social Multinacional Global conformarán un Consejo no gubernamental con el objetivo de plantear ante los gobiernos federal, estatal y municipales así como ante los organismos internacionales responsables de la materia el establecimiento de una política agrícola y cafetalera acertada.
No representará a partido político alguno u asociación religiosa.
Debemos tomar conciencia de que un esfuerzo de esta naturaleza exige el compromiso y la participación organizada y decidida de las bases productivas.




Café por la Paz para Unir al Mundo


La promoción del paquete de Café por la Paz tiene por objetivo generar empleo y mejorar los ingresos en las comunidades más pobres del mundo bajo un esquema de comercio equitativo.
Colaborando al mismo tiempo en los esfuerzos de los Movimientos Nacionales por la Paz de diferentes países, tal es el caso de México, Vietnam, Cuba y Alemania. Organismos como éstos conforman el Consejo Mundial de la Paz.
En torno a un buen Café como el que degustamos, nos damos un espacio en el tiempo para reflexionar en la soledad y dialogar colectivamente sobre diversos temas de actualidad.
Ahora, se trata de que la bebida del pensamiento y de la razón coadyuve en los diálogos contra la guerra, por la PAZ.


EN 1713 UN CAFETO SELLÓ EL PROTOCOLO DE LA PAZ DE ULTRECH ENTRE FRANCIA Y LOS PAÍSES BAJOS


1. El Café es el producto común en el cinturón tropical de los cinco continentes del globo; la bebida de mayor consumo en occidente cuya producción genera en su origen una gran riqueza: más de 70 billones de dólares anuales en ventas al detalle. Sin embargo, la inmensa mayoría de las 25 millones de familias de productores se encuentran en condiciones lastimeras de pobreza.
2. Los países de Oriente consumen cada vez más la bebida llamada “Del Intelecto”.
3. El CAFÉ POR LA PAZ es una promoción que cada Movimiento por la Paz de los Países Productores realiza:
• Gestionando ante las autoridades y el sector cafetalero (agricultores, industriales, etc.) el apoyo para la producción, distribución doméstica y envío del paquete CAFÉ POR LA PAZ a los países no productores.
• Realizando las negociaciones con las cadenas distribuidoras de cada país consumidor para su comercialización. La promoción del paquete del Café por la Paz se hace por medio de miembros voluntarios de los Movimientos Nacionales.
• Y solicitando ante los Organismos Internacionales acuerdos de apoyo promocional.
• También el apoyo de los medios de comunicación masiva.
4. Bajo el esquema de Comercio Equitativo, el diferencial entre el precio de venta y costo de producción y distribución, se hará llegar a la promoción por la Paz. Millones de dólares se gastan en la construcción de armas letales y en la promoción de guerras, sin embargo no hay dinero invertido en la promoción de la Paz.


Café por la Paz (paquete): 13 oz de Café de Altura, cafetera emblemática artesanal, juego de tazas o termo, golosina de Café y artículo promocional








La Empresa Social Multinacional Global, una propuesta específica de integración






El concepto de Empresa Social Multinacional Global es una iniciativa de gran escala integrada por pequeños productores minifundistas asociados para lograr productividad, dar escala competitiva comercial y manufacturera y equilibrar sus condiciones de negociación con las grandes corporaciones transnacionales que dominan la industria del café y otros productos básicos.
La mejor forma de resistir a los efectos adversos derivados de la dominación de las Grandes Corporaciones Transnacionales (GCT's) y de subordinación a la globalización neoliberal del Consenso de Washington, radica en nuestra capacidad de idear y poner en práctica instituciones, instrumentos y formulas que den escala competitiva a las dispersas y fragmentadas acciones de nuestras unidades económicas de producción y comercialización.
Para el efecto debemos constituir y poner en operación el concepto de Empresa Social Multinacional Global (ESMG) -como contrapartida a las GCT'S- dentro del esquema de una Organización Latinoamérica de Comercialización Agropecuaria y Forestal (OLCA) en el marco de un Nuevo Sistema Económico y Social Latinoamericano (Nuevo SESOL), instituciones que reconociendo la realidad del mercado, no ignoran sus imperfecciones monopolísticas y por lo tanto, el Estado deberá normar su ordenamiento en lo nacional y hacer Convenios Internacionales a modo de lograr progreso en las aspiraciones de un nuevo orden económico internacional planteadas desde la década de los 60's y vigorizados en los 70's.
Proponemos la Gran Empresa Social Multinacional Global (ESMG) integrada por pequeñas entidades campesinas, agrícolas y manufactureras, autónomas en su operación, las cuales compartan servicios comunes de abasto de insumos, financieros, comerciales, etc., para abaratar costos y lograr escalas competitivas en los mercados regionales, nacionales y mundial.
En las condiciones actuales, la ESMG apoyada por el Estado, es fórmula adecuada para la integración de América Latina; como contrapartida a las GCT’s que operan de acuerdo con los intereses y decisiones de la matriz, la ESMG de integración sectorial regional responde a los intereses de los países que la forman y representa una buena posibilidad por la independencia económica de las naciones menos avanzadas. Con este tipo de empresas propias, autónomas, sólidas y competitivas podremos alcanzar tangibles avances en el campo tecnológico, comercial, financiero y administrativo.
Organizándolas en torno a proyectos multinacionales detonadores, como pudiera ser la reproducción modular de un paquete agro-tecnológico sustentable en gran escala, integrado desde la producción, la industrialización y el comercio propios, aglutinando a numerosas pequeñas y medianas empresas (PyMES).
Participaran como accionistas los productores organizados al lado de otros agentes de la cadena productiva nacional e internacional como serian agentes aduanales, transportistas, empresas de distribución, industriales e inversionistas en general.
En los territorios de producción agropecuaria, la industrialización en gran escala es la salida más actualizada para la sustitución de importaciones, la cual tendrá que ser necesariamente apoyada con una protección económica mínima para su despegue.
Es un reclamo que la tierra produzca con suficiencia para abastecer en primer lugar a su población, exportar los excedentes e importar lo estrictamente indispensable.
Principio rector de las ESMG’s es que los recursos naturales y humanos ya no pueden seguir perdiendo el tiempo ni emigrar dejando abandonadas sus fuentes de riqueza originaria. Quien tenga idea y proyecto para crear y producir debe ser apoyado cabalmente por el Estado nacional sin regateos ni mezquindades, con la visión que exige el desafío global.
Aún quienes se encuentran fuera del territorio continental latinoamericano pueden incorporarse al esfuerzo de integración por la vía de las ESMG’s.
En el caso del café, hemos venido promoviendo un proyecto empresarial, el cual consiste fundamentalmente en crear una empresa social de escala competitiva en lo global, un Conglomerado Industrial del Café con tecnologías punta en el que los pequeños productores del aromático –como sector social– participen como accionistas en coinversión con el Gobierno Federal y los sectores privados nacional y extranjero, y de este modo revalúen el precio del grano verde que producen dándole valor agregado.
En este proyecto de alta rentabilidad financiera, comercial y económica general contamos ya con la intención de participación de varios inversionistas mexicanos y del exterior; al respecto invitamos al Gobierno Federal para que apoye dentro de los programas establecidos a los pequeños productores de las microregiones cafetaleras con alto grado de marginación.
Solamente a través del riesgo de la acción es posible llegar a la verdad y al cambio.
Es evidente que quien no puede lo menos jamás podrá lo más.