martes, 3 de junio de 2008

Julio Hernandez

Los perredistas han dado ejemplo de pragmatismo extremo. Luego de largas semanas de acusaciones densas, han llegado a acuerdos para que Guadalupe Acosta Naranjo, de Nueva Izquierda, sea “reconocido” como presidente sustituto a cambio de la secretaría de finanzas del comité nacional del sol azteca. Además arribaron a ejemplares acuerdos en defensa de la economía popular y los recursos petroleros. Chuchos y encinistas juntitos, a nombre de unidades a toda costa, ante el peligro de la derecha desbocada. Ya arreglado lo inmediato, seguirán los entendimientos para repartirse venideros cargos, candidaturas y recursos económicos. Hasta que una nueva elección interna los divida (provisionalmente, desde luego) y regrese la encendida retórica y las promesas de depuraciones y refundaciones. No, pos sí... El pálido precandidato presidencial, Marcelo Ebrard (al que López Obrador aplaude y para quien pronuncia vivas), se manifiesta en contra de que la administración federal pretenda canjear apoyo para la desvaída reforma petrolera por reparto de excedentes económicos relacionados con esos recursos energéticos... Desde Bakersfield, California, Javier Trigos-Arrieta se muestra en desacuerdo con que en esta columna pateadora se “satanice” al Cruz Azul porque Juan Camilo Mouriño se declaró uno de sus seguidores... Las cuotas sindicales de los profesores y los petroleros, más la vieja retórica de la “modernización” usada por un ex gobernador de Sinaloa, forman el sólido fantasma con el que se están espantando los anquilosados caciques sindicales cetemistas. Las tretas, los recursos y la perversidad acumuladas en esta alianza SNTE-petroleros también pueden afectar al reformismo laboral que tiene al endeble Javier Lozano al frente... Y mientras Calderón recupera las estampas del machismo presidencial clásico (“palabra empeñada es palabra cumplida”), como hicieron la mayoría de sus antecesores, contentos con la foto oficial, la declaración estruendosa y los resultados que infinidad de veces fueron confirmados nomás en el discurso, ¡hasta mañana, en esta columna música!