domingo, 7 de septiembre de 2008

Derruyen casa de cultura de Chamula para hacer mercado


San Juan Chamula, Chis., 6 de septiembre. En este municipio indígena donde las tradiciones y las costumbres ancestrales se resguardan celosamente, a pocos parece importar la reciente demolición de la casa de la cultura y un museo. Los pocos que han intentado alzar la voz han sido víctimas de amenazas, pues para las autoridades es prioridad construir la central de abasto de San Juan Chamula, una de las pocas localidades que tenía una casa de la cultura.
“No nos afecta en nada que se hayan tirado las casa de la cultura y el museo”, afirma el alcalde priísta Domingo López González. “Vamos a pedir al gobernador (Juan Sabines Guerrero) que nos dé dinero para hacer otra ”.
Las construcciones fueron demolidas hace varias semanas, poco después de la visita del presidente Felipe Calderón a este municipio y de que autorizara recursos para construir el mercado que albergará a los 400 comerciantes que están instalados en la enorme plaza ubicada en la cabecera, donde cada año se celebran el carnaval y la fiesta de San Juan, entre otras, así como plebiscitos y asambleas.
En la casa de la cultura –que ahora funciona provisionalmente en un recinto particular, sin instalaciones adecuadas–, se ofrecían talleres de música tradicional, pintura, teatro guiñol, lectoescritura tzotzil y escultura en madera que permitían fabricar instrumentos musicales (arpas, guitarras, violines). Además albergaba una biblioteca y una sala de cómputo.
En el museo había una muestra de trajes e imágenes de la cultura chamula. Ambos sitios formaban parte del recorrido de miles de turistas nacionales y extranjeros en este municipio.
López González dijo que el mercado, que tendrá un costo de 19 millones de pesos y deberá estar concluido a más tardar en febrero próximo, será construido en un lote ubicado a espaldas de la alcaldía, donde también estaba un pequeño mercado que igualmente fue demolido.
El alcalde agregó que la casa de la cultura y el museo serán construidos posteriormente pero admitió que el gobierno estatal no ha autorizado recursos para las obras ni se cuenta con el terreno en el caso de la primera.
Se sabe que cuando se planeó demoler el edificio, los directivos de la casa de la cultura protestaron pero las autoridades impusieron su poder y respondieron con un acuerdo de cabildo en el que se asienta:
“Se le autoriza al presidente municipal constitucional para que realice los trabajos de demolición de los tres edificios (casa de la cultura, museo y mercado viejo), de acuerdo con los artículos 75 y 100 de la ley agraria, que en su párrafo primero a la letra dice: ‘la comunidad determinará el uso de sus tierras, su división en sus distintas porciones según distintas finalidades y la organización para el aprovechamiento de sus bienes”.
En el acta de la sesión extraordinaria de cabildo convocada ex profeso se agrega: “Se le solicita al presidente municipal que se lleven a cabo los trabajos de demolición con mucha precaución para evitar cualquier tipo de accidentes”.
El edificio fue constuido en 1990, previo a la conmemoración de los 500 años de la llegada de los españoles, cuando era alcalde Santos Gómez Jiménez, quien al conocer la noticia del derribo de la casa de la cultura, simplemente se encogió de hombros.
Construir una casa de la cultura como la que fue derribada costaría unos cinco millones de pesos.