viernes, 12 de diciembre de 2008

Los salarios obreros en México, los más bajos de AL: Bertha Luján

Patricia Muñoz Ríos
Los salarios obreros en México son los más bajos de toda América Latina, ya que han sufrido un descenso de más de 70 por ciento en su poder adquisitivo. Sólo en la presente administración el minisalario perdió 20 por ciento de su valor y los trabajadores mexicanos tienen menor capacidad de compra que hace tres sexenios, sin embargo, otra vez se monta el “teatro” laboral de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (CNSM) para otorgar un magro aumento que no rebasará los 3 pesos.
En un análisis elaborado por la secretaría del Trabajo del “gobierno legítimo”, se señala que sólo en lo que va de este gobierno los incrementos salariales a los mínimos han sido de 8 por ciento, mientras el precio de la canasta básica promedió un incremento de 27 por ciento, lo que significa que el poder de compra de los trabajadores se contrajo unos 20 puntos porcentuales.
Artículos indispensables como la tortilla han tenido incrementos de 42 por ciento; la leche 53 por ciento; el pan 60 por ciento; el frijol 100 por ciento; el azúcar 40 por ciento; el arroz l30 por ciento y un elemento básico que ha desatado la inflación es el aumento gradual en los combustibles y la electricidad, ya que precisamente el costo del servicio de luz aumentó este año ciento por ciento, la gasolina ha tenido aumentos permanentes y el gas se encareció 12 por ciento.
Según indicó esta representación, acaba de instalarse la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos para negociar el aumento a los salarios que estarán vigentes el próximo año y como es predecible, de nueva cuenta se otorgará el porcentaje que determinen los patrones y el gobierno.
Como ya es costumbre, el sector patronal de inmediato ha sugerido un “nuevo sacrificio” de los trabajadores para “impedir el cierre de fuentes de trabajo y contener la inflación”. Por su parte, el sector sindical oficial representado por la Confederación de Trabajadores de México (CTM), ha declarado estar de acuerdo con la necesidad de que de nueva cuenta se aprieten el cinturón los trabajadores para enfrentar la crisis económica.
Incluso el mismo secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón, ha insistido en que el sector sindical debe ser prudente y entender la situación, y no agravarla con planteamientos de incrementos salariales por arriba de la inflación. “Todo ello nos lleva a considerar que de dicha comisión no podemos esperar otra cosa sino más de lo mismo: un incremento a los salarios mínimos que de ninguna manera ayudará a recuperar la pérdida del poder adquisitivo acumulada en 25 años, más los 23 meses de gobierno del espurio Calderón”, indicó Bertha Luján, titular de esta oficina.
Hizo ver que urge un cambio de modelo económico que fortalezca la producción nacional y el mercado interno a partir de una política de incremento a los salarios reales, y llamó a todas las organizaciones obreras y al pueblo en general a movilizarse para exigir un incremento a los salarios mínimos por encima de la inflación; demandar el congelamiento de precios de los alimentos, la reducción de los precios de la gasolina, diesel, gas y electricidad, así como garantía de precios a los productos del campo y fortalecer los programas sociales.