miércoles, 11 de julio de 2007

El VIH



VIH


el virus de inmunodeficiencia humana – ataca el sistema inmunológico, el que precisamente está encargado de defender al cuerpo de las infecciones. El virus ataca un tipo de células blancas en particular llamadas células CD4+. Secuestra dicha célula, implanta sus propios genes en el ADN de la célula, y la utiliza para fabricar más partículas del virus. Éstas, a su vez, infectan otras células. Las células CD4+ huésped eventualmente muere, aunque los científicos no saben exactamente cómo sucede esto. La capacidad del cuerpo para combatir las enfermedades aminora a medida que el número de CD4+ se reduce, hasta llegar a un punto crítico en el que se establece que el paciente sufre de SIDA – el síndrome de inmunodeficiencia adquirida. El VIH es un tipo especial de virus llamado retrovirus. Aunque más sencillos que los virus ordinarios, los retrovirus tienden a ser más difíciles de combatir. Implantan sus genes en el ADN de las células que atacan, de manera que la célula huésped se reproduce en células que también contienen el virus. Los retrovirus hacen réplicas de sus genes en las células atacadas con un alto nivel de errores. La velocidad a la cual se reproduce el VIH resulta en un acelerado ritmo de mutación del virus a medida que se disemina. Más aun, el revestimiento que envuelve la partícula del VIH está compuesto del mismo material que algunas células humanas, lo que dificulta que el sistema inmunológico pueda distinguir entre las partículas virales y las células saludables.