martes, 1 de enero de 2008

Nueva York recibe 2008 con su tradicional bola de luces

La tradicional bola de luces que bajará a la medianoche en Nueva York cumple un siglo de vida.

Nueva York. Cientos de miles de personas se congregaron el lunes en Times Square para recibir el 2008 con la tradicional bola de luces que bajará a la medianoche en Nueva York, un rito que cumple un siglo de vida.
La bola luminosa que cae a lo largo de un mástil en la cuenta regresiva del último minuto del año se convirtió con el paso del tiempo en uno de los acontecimientos mundiales que marcan simbólicamente la llegada del Año Nuevo.
Para la edición 2008, la ciudad de Nueva York se dotó de una nueva bola de dos metros de diámetro que en lugar de lamparitas comunes tendrá 9.576 luces LED de colores y 672 triángulos de cristal.
Las nuevas luces de bajo consumo gastarán el equivalente de diez tostadoras de pan y reemplazan las 600 lámparas halógenas de la versión anterior.
Desde los atentados del 11 de septiembre de 2001 que marcaron la página más negra de la historia de la ciudad, la ceremonia se realiza con medidas de seguridad reforzadas.La policía cortó el tránsito vehicular por la tarde. Se prohibió llevar bebidas alcohólicas y bolsas grandes para facilitar el control policial.
Los accesos a Times Square, en pleno corazón de Manhattan, fueron bloqueados por miles de policías en toda la zona.Por todas partes había vehículos policiales y ambulancias, y hasta una camioneta con un "equipo de negociación de liberación de rehenes" se abría camino entre la muchedumbre.La gente comenzó a llegar al lugar el lunes poco después del mediodía.
Italianos con anteojos luminosos con forma de "2008", libaneses con sombreros plateados, franceses tocando pitos: todos se disponían a pasar de año a la intemperie del invierno neoyorquino, bajo un cielo despejado y un clima fresco pero con temperaturas superiores a cero grados Celsius.
"Quiero tener un buen lugar, estoy muy entusiasmada y no me importa tener que esperar varias horas", dijo Asami Maede, una japonesa de 22 años que llegó desde el Estado de Virginia donde trabaja cuidando niños para mejorar su inglés.
"El centenario será espectacular", adelantó Jeff Straus, presidente de la asociación que organiza anualmente el festejo."La bola será una especie de diamante resplandeciente que cae del cielo", agrega Paul Gregory, responsable de la iluminación. "La alianza de una nueva forma de cristales y de técnicas actualizadas de iluminación dará un resultado excepcional".
La llegada del año congrega gente en este cruce de la calle Broadway y la Séptima avenida desde 1903, pero fue en 1907 cuando por primera vez en la ciudad que nunca duerme la esfera luminosa descendió desde su mástil.
Inicialmente construida en madera y acero, la bola tenía en ese entonces 100 lamparitas de 25 watts y pesaba 300 kilos, y fue reemplazada por una versión más sofisticada en 1920.
Desde hace un siglo se realiza el rito de la bola cada Año Nuevo, con excepción de 1942 y 1943, en lo más crudo de la segunda guerra mundial, cuando la ciudad se impuso límites al encendido de luces.
En 1950 se sustituyó el acero por aluminio y la bola pasó a pesar solo 68 kilos. Esa versión liviana se utilizó hasta los años 80, con el agregado de lámpara de colores. Para el 2000 se inauguró una con cristales especiales.
Se espera que este año el alcalde de la ciudad Michael Bloomberg accione el botón que inicia el minuto final y concluye con la aclamación de la muchedumbre y la caída masiva de papel picado desde los rascacielos que rodean el lugar.
La idea de representar el paso del tiempo mediante una bola que baja proviene del observatorio real de Greenwich (Gran Bretaña), donde desde 1833 un dispositivo equivalente y visible desde lejos marca cotidianamente la una de la tarde, permitiendo así ajustar a los marinos los relojes.