sábado, 19 de octubre de 2013

De manera subrepticia se quiere eliminar el impuesto a puros en la reforma fiscal: ONG

De manera subrepticia se quiere eliminar el impuesto a puros en la reforma fiscal: ONG
Prevé que la recaudación fiscal por ese rubro disminuiría unos 500 millones de pesos al año
Ángeles Cruz Martínez
 
Periódico La Jornada
Sábado 19 de octubre de 2013, p. 6
De manera subrepticia se introdujo a la reforma fiscal la eliminación del impuesto especial al consumo de puros y cigarros labrados a mano, lo que representa una regresión en la política nacional para erradicar el tabaquismo en el país, denunció la Fundación Interamericana del Corazón (FIC).
Erick Antonio Ochoa, director de Iniciativas para el control del tabaco de la FIC, señaló que ese cambio ignora los avances que trajo la aplicación de un gravamen de siete pesos a los cigarros a partir de 2011. La medida ha contribuido a mantener la tendencia descendente del consumo, que de 2010 a 2011 pasó de 22 cajetillas a 16 por persona al año. Y así se ha mantenido, indicó.
Los legisladores y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público también desconocieron la evidencia de que por cada 10 por ciento que se incremente el precio de los cigarros, la compra de estos productos baja 8 por ciento en países de ingresos bajos y medios como México.
Sólo entre los jóvenes, ese mismo aumento reduce 7.4 por ciento la prevalencia del consumo, indicó el activista.
En conferencia de prensa, comentó que, a pesar de la información que recibieron de las organizaciones civiles promotoras de la lucha contra el tabaquismo en el país, los diputados ya habían señalado en pasillos que la reforma fiscal no incluiría ningún aumento a los impuestos de los cigarros. Sin embargo, lo que no dijeron era que tenían la intención de eliminar el gravamen a los puros y cigarros hechos a mano.
Debido a que el tema no se planteó de manera abierta ni se difundieron los argumentos para llevar a cabo tal cambio, Antonio Ochoa supuso que se trató de una negociación con la industria tabacalera, pues la misma reforma fiscal introdujo la obligación para las empresas de colocar un código de barras en las cajetillas como medida de seguridad y para tener mejor control de la producción y la ruta que siguen las mercancías.
Foto
Los diputados del PRI y los chuchos del PRD votan la sesión que terminó a las 5:30 am de este viernesFoto Francisco Olvera
Suponemos que a cambio las autoridades aceptaron no tocar los impuestos e incluso eliminar los ya mencionados, tal vez con base en la iniciativa que en mayo pasado presentó la diputada Marina Garay del PRI, justamente para que se exentara a los puros y otros tabacos labrados a mano, del impuesto especial a productos y servicios.
Si bien este tipo de tabacos representa entre 3 y 5 por ciento del consumo en el país, la decisión de los diputados significará, en términos de recaudación fiscal, una disminución de alrededor de 500 millones de pesos al año.
Recordó que en 2012, los ingresos al fisco por los siete pesos que se recaudan por cajetilla vendida, ascendieron a 33 mil 400 millones de pesos, es decir 6 por ciento más que el año anterior.
Y eso que el principal objetivo de la medida es desalentar el consumo, principalmente entre los jóvenes, a fin de prevenir enfermedades graves y reducir la carga financiera que su atención representa para el sistema nacional de salud. Investigaciones estiman que por cuatro padecimientos (cáncer de pulmón, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, infarto agudo al corazón y eventos cerebro vasculares) el país invierte entre 45 mil y 75 mil millones de pesos al año